Agresividad infantil: Así como existen tanto comportamientos como niños sobre la faz de la tierra, no es posible determinar las causas por las que la conducta de un niño se torne agresiva, puesto que existirán tantas facetas como comportamientos o sujetos hay. Sin embargo existen algunas conductas que pueden llevar a que el comportamiento por llamar la atención se vuelva agresivo.
5 Maneras para corregir la agresividad infantil
- Observación
En primer lugar debemos detectar el foco de la agresividad. Un niño, generalmente es como una esponja que absorbe todo lo que recibe como estímulo, sea visual, auditivo, a través de algún medio de comunicación o bien de manera directa de otra persona. Por tanto, como educadores o padres debemos esforzarnos para hallar el estímulo agresivo que lleva luego a que el niño desee imitarlo o comunicarlo.
También es importante reconocer que, en esta reproducción de la agresión, el niño intentará mostrar (como denuncia personal o propia) aquello a lo que se somete. Es decir, querrá expresar las mismas palabras del estímulo agresivo que recibe (si el niño insulta o reacciona de una determinada manera es muy probable que lo haya imitado del estímulo agresivo).
- Juego de roles
La técnica del juego de roles ayudará a dejar en descubierto el motor de la agresión dado que, este mismo motor (aunque hemos hablado de estímulos externos) también puede ser una expresión interna de algo que le esté ocurriendo al niño; una separación de los padres, una mudanza, el cambio de escuela, etc.
El juego de roles consiste en actuar como si el niño estuviese en otro contexto. Por ejemplo si sospechamos que es en el hogar donde se produce el foco de conflicto o agresión, podemos simular una actuación donde, el mismo niño tome el rol del padre o de la madre mientras que otros compañeros actuarán como él. De este modo se podrá ver internamente lo que ocurre en el hogar.
También se puede realizar este mismo esquema con otros contextos que el adulto considere puedan estar afectando al niño; aula, grupo de deportes, grupo de encuentros religiosos, etc.
- Comprensión por sobre todas las cosas
Un niño agresivo es un niño triste que debe ser comprendido. Esto no significa que le debemos permitir absolutamente todo, pero sí que comprendamos que algo no está bien en su vida. Es el primer paso para poder enmendar el daño que haya recibido.
- La descarga de la ira es necesaria
Dentro de un contexto adecuado no es erróneo dejar que el niño descargue su ira. Por el contrario debemos fomentar esto. Podemos utilizar bolsas con arena, guantes y protección o practicar algún deporte que les ayude a descargar aquella bronca, siempre y cuando no lastime a otros niños ni se autoagreda (esto es conveniente realizarlo con supervisión profesional).
Una vez que él haya descargado su agresividad, es importante llamar al diálogo.
- Un abrazo y mucho diálogo
Un niño agresivo necesita, en primer lugar comprensión y en segundo lugar cariño. Por tanto una palabra, una caricia y mucha comprensión y confianza es lo que él está demandando. Tal vez se sienta incomprendido o precise de ayuda pero no sepa de qué forma pedirla.
Por otra parte es recomendable la intervención de un tratamiento psicológico que ayude al niño a expresar aquello que le esté haciendo reaccionar con agresividad.
Vídeo educativo: 5 Maneras para corregir la agresividad infantil
© 2017 Agresividad infantil, como corregirla. Escuela de padres. Educapeques
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Licenciado en Ciencias Biológicas con más de 30 años de experiencia en educación como docente en el Centro de formación ACN y creador de Blogs educativos: educapeques.com, educayaprende.com, escuelaenlanube.com, docenciaparalaformacionenelempleo.es. Actualmente imparto cursos de formación profesional en la Academia de Valdepeñas
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