El Diario de Jorge volvía a la parrilla de Mediaset, como un martes más. Jorge Javier iba a ser el anfitrión que iba a recibir en el plató a los mejores testimonios más sorprendentes de varias personas totalmente anónimas para el espectador.
Este nuevo espacio del expresentador de Sálvame recuerda en su dinámica al mítico Diario de Patricia, de Antena 3. El programa es capaz de conectar directamente con la audiencia de Telecinco, gracias a los numerosos relatos que abordar cada tarde en El Diario de Jorge.
En el programa de este martes, Jorge Javier iba a abordar el emotivo testimonio de Guillem: "Pasó por un calvario de operaciones a vida o muerte durante su niñez. Hoy lleva una vida normal gracias a la labor de los médicos que hicieron lo imposible por salvarle. Hoy viene a agradecérselo a uno de ellos. Que pase Guillem".
"Estoy un poquito nervioso", comentaba el invitado nada más sentarse en el sofá para empezar la entrevista con Jorge Javier. "Nací y en menos de 24 horas me tuvieron que meter en quirófano. Mi madre tuvo un percance cuando nací, la placenta se quedó dentro y mi abuela tenía que darme los biberones. Tenía una obstrucción intestinal. Después de la operación le dijeron a mis padres que no había nada que hacer. Pero salí adelante", relataba Guillem ante la atenta mirada del presentador.
"Gracias a los profesionales del Hospital de la Fe de Valencia, pero en especial a un doctor que fue el que estudió mi caso hasta el final", relataba Guillem. "Fue desgarrador para mis padres", añadía.
Así, Guillem venía esta tarde a El Diario a agradecerle que le salvara la vida de pequeño. El joven también relató que pasó hospitalizado durante los primeros cuatro años de su vida.
Gracias al equipo médico del doctor Vila, Guillem fue diagnosticado con Síndrome de Waardenburg, un trastorno que se caracteriza por grados variables de sordera y defectos menores en estructuras derivadas de la cresta natural que resultan en anomalías en la pigmentación de los ojos, cabello y piel.
"El doctor Vila para mí es un referente en la vida porque me cuidó, tuvo tacto conmigo y con mi familia. Llevó mi caso hasta el final y logró salvarme. Gracias a él, yo estoy aquí", relataba Guillem. Tras acabar de conversar con el joven, Jorge dio paso al doctor Vila.
"Echo de menos operar", confesaba el doctor. "A veces es duro, pero la satisfacción que da salvar la vida a un niño pequeño es insuperable", añadía. De esta manera, aseguraba que cuando el paciente es un niño, es mucho más duro que lo emocional.
"Me emociona hablar contigo, perdóname", se rompía Jorge en la conversación con su invitado. "Convivir todos los días con la vida y con la muerte, sobre todo con la muerte de niños... pero un niño", relataba el presentador catalán.
Tras escuchar el relato del doctor Vila, El Diario de Jorge proyectó un mensaje en forma de vídeo que Guillem había preparado para su salvador. "La historia de Guillem es muy bonita porque es enfermero y cuando terminó fue a verme", explicaba. Jorge Javier no podía evitar la emoción y contemplaba sus palabras con los ojos vidriosos.
"Logré que le contrataran en nuestro hospital. Es un magnífico profesional", añadía el profesional sanitario. "Ay, se me ha metido algo en el ojo. No creas que estoy llorando", apuntaba Jorge Javier en ese momento. "A mí también", añadía el doctor.
Guillem y el doctor Vila se reencontraban con un fuerte abrazo en plató. "No se puede comprar nada para agradecerte todo lo que has hecho como buen médico que eres. No hay nada para agradecerte todo lo que has hecho por mí. Si no fuera por ti no estaría aquí contigo", se dirigía el joven al doctor que le realizó la operación.
Por último, Jorge Javier quiso hacer un alegato sobre la sanidad pública: "Es fundamental la sanidad pública, tenemos que cuidarla, es una joya que tenemos, hay que invertir y pagar bien a los profesionales. La sanidad pública tienen que ser un objetivo primordial de todos los gobiernos de este país, sean del color que sean. La sanidad nunca puede ser un negocio".