Pepe tiene 62 años. Es un hombre tranquilo, que se reconoce lento hablando (“es marca de la casa”, asegura) y que ha ido a First Dates este lunes a encontrar el amor. Una mujer femenina, con carácter, que se cuide y no sea ordinaria. Es conductor de camión, y cree que es un oficio que genera prejuicios. Es más, antes de ver a su cita, ya dejaba claro que no todos los camioneros son mujeriegos. Aunque ha recorrido Europa, ahora es conductor en la Junta de Andalucía.
Su compañera para esta noche ha sido Carmen, quien ha dejado en el aire cuántos años tiene. No quiere un hombre caballeroso, sino natural. Quiere que los hombres se muestren tal cual son. En su primer encuentro, él se ha mostrado encantado, aunque ella ha tenido más dudas. “No muy bien, bien”, era su impresión.
En el restaurante que regenta Carlos Sobera ambos se han puesto al día sobre sus vidas. Pepe contaba cómo estuvo casado, en la actualidad es divorciado y tiene una hija de 17 años. “He sido siempre camionero. Ahora soy celador-conductor”, contaba sobre su profesión. Y esto no ha hecho demasiada gracia a Carmen, que no entendía tampoco cómo había dejado el camión por el mundo de la sanidad. “Eso me ha mosqueado bastante”, comentaba.
Poco a poco, ambos empezaron a encontrar puntos en común. Pepe tiene dos motos, y a ella le gusta viajar; de hecho, ya ha tenido novios moteros. Por lanzar un cumplido, el conductor le dijo lo bonitos que tenían los ojos, y para ella era algo manido, que le decía todo el mundo. “Me gustan los hombres más inteligentes, aseguraba”. También coincidieron en el gusto por la música, y en concreto, por el género de la copla.
Carmen confesó que le encanta el queso, y Pepe se ofreció a llevarle uno muy bueno que conocía. Y tras esto se ofreció a pagar la cuenta e invitarla a cenar. “He sentido una atracción hacia ella, y ese feeling”, admitía él. “Qué caballero, no sabía yo que había caballeros. Un detalle, muy bien, muchas gracias”, decía de buena gana la soltera, a pesar de que, al principio, afirmaba no buscar un caballero.
A la hora de decidir si tendrían una nueva cita, Pepe lo tenía claro. “Una segunda, y una tercera, las que pudieran ser. Es una mujer que me ha encantado”, admitía el conductor. Ella, sin embargo, se mostraba con dudas. “No sé, por el trabajo que has tenido antes. Ya sabes el tema de los camioneros, la fama del camionero, hay cosas que no me cuadran mucho, pero nunca se sabe”, reflexionaba. “El pasado no me persigue”, le aclaraba Pepe. Tras esto, Carmen aceptó tener una segunda cita, “a pesar de mis dudas”.