Este lunes se celebra una nueva gala de Operación Triunfo, en la que la cantante Edurne ejercerá de jueza invitada, y en la que sumará sus valoraciones a las de Buika, Pablo Rouss y Cristina Regatero. Pero en esta misma jornada, el programa ha estado también en el centro de muchas conversaciones por las duras críticas que ha lanzado hacia el formato el cantante Iván Ferreiro durante una entrevista en el canal de YouTube Último Acorde.
“A mí Operación Triunfo me la sopla, e incluso creo que tendría bastantes críticas hacia el programa. Me parece una carnicería que juega con los sueños de unos chavales, de los que el 90 o 99% van a tener una vida bastante miserable por culpa de lo que les prometen”, ha sentenciado el que fuese líder de la banda Piratas.
El artista, que ya en el pasado se ha mostrado en contra de los concursos musicales, considera que el formato que ahora presenta Chenoa es “una picadora de carne”. “Cada vez se parece más a eso, a un mundo horrible al que todos miramos”, sentencia. A pesar de esto, parece ser conocedor de cómo funciona el concurso, y destacó cómo “el OT de Amaia me sorprendió mucho, ella canta increíble y hubo momentos emocionantes”, en referencia a la temporada emitida entre 2017 y 2018. Sin embargo, el programa, a su juicio, cada vez está “más alejado de la realidad”. “Para mí no hay nada más alejado de la competición que la música, la música debería ser lo menos competitivo que hay”, continúa narrando, y detallando que por este motivo no le interesan “los Grammy, ni mierdas de esas. Ni los Oscar, ni los Goya. Me parece una verdadera basura, un estercolero. Ir premiando películas o canciones me parece realmente horrible”.
En redes sociales, Ferreiro lanzaría más críticas hacia el programa, pero su pareja le corta; de no ser así, “me cagarían todos”. Y es que él le parece “cruel” la televisión, y cómo se juega con el sueño de los participantes con promesas de una carrera que pocos afortunados alcanzarán.
En su discurso, Iván Ferreiro también desliza que haría más críticas “si sólo afectara al tonto de Tinet Rubira o a alguno de estos que llevan los programas. Esa gente que no le interesa la música en absoluto. O a los profesores, que me parece que son unos cantamañanas todos. Estaría quemándome todo el rato, pero me parece que no tiene ningún sentido”, finaliza, no sin antes apuntar a que todas estas personas hacen su trabajo.