El juicio de los padres de Alfonso Merlos contra La Fábrica de la Tele, Mediaset y el reportero Sergi Ferré ya ha comenzado. El pasado mes de mayo, los progenitores del comentarista político presentaron una querella contra la productora, la cadena y el periodista por "acoso, coacción y lesiones" en el Juzgado número 6 de Molina de Segura (Murcia). Este pasado martes 12 de septiembre, ha sido cuando se les ha prestado declaración, según ha podido conocer EL ESPAÑOL.
La productora, la cadena y el reportero han declarado en calidad de investigados en el Juzgado número 45 de Plaza de Castilla, en Madrid, según fuentes de total solvencia. Tras prestar testimonio, queda ahora en manos del juez encargado decidir si la querella prosigue o no.
Los acusados declararon a las 10 de la mañana y la decisión sobre si la demanda continúa al siguiente paso puede decidirse en cuestión de un mes. La denuncia tiene su origen en un hecho ocurrido el 11 de mayo de 2020, cuando el citado reportero se presentó cerca del domicilio de los padres de Merlos en la localidad murciana junto con un equipo de la productora tras ser enviado por la misma. Por ello, los progenitores de Merlos decidieron demandar en Molina de Segura tanto a La Fábrica de la Tele, como a Mediaset; así como al trabajador que acudió a cubrir la noticia.
La fecha en la que se fue hasta Molina del Segura fue pocos meses después de estallar el llamado 'caso Merlos Place', el que se descubrió, en una conexión en directo del periodista, que este le estaba siendo desleal a su pareja por aquel entonces, Marta López, con Alexia Rivas, reportera por aquel entonces del programa Socialité. Dado que el caso sucedió en pleno confinamiento por la pandemia del COVID-19, este se magnificó, convirtiéndose en uno de los temas más comentados de ese momento. Por otro lado, esta querella es paralela a la que tiene el propio Merlos contra la productora.
Según ha podido averiguar este medio, La Fábrica de la Tele se sorprendió al ver a Sergi Ferré acompañado por el abogado Jesús Manuel Ruiz, quien estuvo también vinculado a la productora durante años. El reportero fue demandado también, a pesar de tratarse de un trabajador que sólo acudió al domicilio de los padres de Merlos tras ser enviado por la propia productora.