Este miércoles, en el programa 25 palabras, el presentador Christian Gálvez lanzó un órdago a Álex, el concursante que ya llevaba 12 programas y 6.000 euros acumulados. Antes de comenzar las pruebas, el maestro de ceremonias quiso hablar del trabajo de los padres de Álex, que tienen una tienda de ropa. “Las camisas de tus padres molan mucho, la tienda también. Además, llevan muchos años y lo hacen muy bien’’, afirmó. Y entonces le pidió al participante, que, de continuar en el formato, le llevase una blusa del negocio familiar, “la que tú elijas”.
Dicho y hecho. En el programa de hoy, Gálvez ha aparecido en el centro del plató junto a Álex, que fue el mejor de la entrega del día antes. Sin siquiera dar paso a la repesca, el presentador y escritor quiso aclarar por qué no estaba en el sitio de siempre y la razón por la que estaba así vestido.
“Muy buenas a todos, bienvenidos a 25 palabras. Ustedes se estarán preguntando qué hacemos aquí este señor y yo el comienzo del programa, cuando toca la repesca. Bueno, por si alguien se perdió el programa anterior, se estarán preguntando por qué Alex va guapo, como un pincel, espectacular, y yo voy con una máscara veneciana”, explicaba Gálvez sobre su atuendo.
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Entonces explicó que a él le gusta meterse con los concursantes que llevan ya un tiepo en el concurso, y que Álex “traía a una ropa un tanto esperpéntica, entonces yo me metí un poquito con él”. Cuando llegó al fin el programa, le preguntó que a qué se dedicaban sus padres, y el concursante explicó que a vender ropa y que tienen una tienda. De hecho, la prenda que Gálvez había atacado era un ejemplo de los productos que despachan. “Entonces yo me hundí cual Titanic hasta el fondo. Había sitio en la maderita, pero yo, como DiCaprio, hasta el fondo”, continuó diciendo.
Para “redimirse” de lo que había dicho de la camisa le pidió a Álex que eligiese una prenda, pero a la vista está que no fue de su gusto. “No puedo decir a esta hora lo que pienso de este señor”, añadía de broma, dando a entender de que le insultaría si el horario fuese el adecuado. Además, Álex va “guapo como un pincel” porque “le ha vestido mi estilista, es mi ropa”. Para calmarle el cómico enfado, el concursante le decía que “los dos van guapos”, y antes de comenzar la repesca, el presentador apostilló que podría no haber ejercido de esa manera la venganza.