La boda de Tamara Falcó e Íñigo Onieva ha acaparado la información de crónica social este fin de semana. Todos los programas de televisión cubrieron el evento del año con coberturas especiales, con reporteros en diferentes lugares de interés: desde la entrada de El Rincón, finca en la que tuvo lugar la ceremonia y la fiesta, hasta la casa del novio, en el centro de Madrid.
Socialité recogió este domingo la 'resaca' de la boda. El espacio que pilota María Patiño quiso mostrar a la audiencia el caos que tuvieron que soportar todos los periodistas para recoger una declaración de los protagonistas. De hecho, Emma García llegó a incidir en Fiesta en los insultos que se escucharon en directo en El Rincón. La tensión fue máxima.
En este contexto, y después de mostrar las imágenes de la salida de Onieva de su domicilio, Patiño lamentó que los invitados no pusieran las cosas más fáciles a los reporteros. "Ay, Laura [Roigé], os entiendo tanto. He vuelto atrás, a mis años de trabajar en esas circunstancias. Voy a decir algo y, si crees que estoy equivocada, quiero que me lo digas. Entiendo que se les dé las gracias a los invitados por bajar la ventanilla, pero creo que nos contentamos con tan poco...", dijo.
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La presentadora continuó reflexionando: "Me da la sensación de que aplaudimos con solo unas migajas. Teniendo en cuenta que esta pareja vale un millón de euros en el mercado, me parece obvio que el resto de medios quiera su tajada. A la hora de poner en valor tu relación, que te bajen la ventanilla y aplaudamos como si no hubiese mañana... No sé".
Minutos más tarde, Socialité mostró la llegada de Onieva a la finca, en una actitud muy relajada, demasiada quizás. "Venía con la gorra puesta, que no lo entiendo. Un novio que se acaba de duchar, de lavar el pelo, que le habrán peinado un poco... Ponerse una gorra y unas gafas de sol era más propia de salir de fiesta otra vez que de ir a casarse", opinó Roigé.
Fue entonces cuando Patiño infringió el Código Ético para mencionar a Kiko Rivera, uno de los vetados por la nueva cúpula de Mediaset, aunque no de forma directa. "Fíjate, cuando vi esa imagen dije: 'Sí llega a ser el hermano de Isa Pantoja, hablaríamos todos tanto de otra manera...' Ahí me quedo. A mí Íñigo Onieva me ha conquistado porque me gusta la gente que se sale del protocolo", apuntó.
Esta no ha sido la primera vez que un espacio de Telecinco habla de Kiko Rivera como el "hermano de Isa Pantoja". En este nuevo rumbo de ofrecer unos contenidos más blancos y amables, los programas de la cadena tienen prohíbidos hablar de personajes como Antonio David Flores, Rocío Carrasco, Sofía Suescun o Bárbara Rey.