Cuenta Jesús Vázquez que hace unos meses recibió la llamada de Jaime Guerra, director de la División de Producción de Contenidos de Mediaset, para preguntarle cuál de todos los programas que ha presentado en su trayectoria en el grupo de Fuencarral le gustaría que volviera. El presentador tuvo claro que quería que volviera Allá tú, el concurso de las cajas que fue todo un éxito en Telecinco entre 2004 y 2008.
Allá tú vuelve hoy (22.00) en Telecinco con la misma esencia que ese Allá tú, cuando se grababa en Barcelona y con la misma productora, Gestmusic. "Saben hacer muy bien los concursos y Montse Claros [la directora] es el puto número 1", asegura Vázquez que, no tienen ningún problema en reconocer que la edición que se hizo en 2011 para Cuatro no funcionó porque "el equipo no entendió la esencia".
Jesús Vázquez reconoce, además, que no ha visto Allá tú cuando estaba presentado por Silvia Jato y Arturo Valls. "No suelo ver los programas que he hecho yo y que ahora hacen otros", asegura. "No he visto La Voz desde que no lo hago yo, ni vi Operación Triunfo cuando no lo hacía porque me da mucho coraje".
¿Los tirantes son el uniforme del programa?
Bueno, no es estrictamente obligatorio, pero siempre salgo con tirantes y corbata porque lo decidimos así con Roberto, mi estilista. Cuando me preguntó le dije que quería un rollo banquero. De ahí mi aspecto como si estuviera en Wall Street.
En la rueda de prensa, has dicho que te llamó Jaime Guerra y de los programas que habías hecho dijiste Allá tú. ¿Podrías haber dicho otro Hablando se entiende la gente?
Dije otro más, pero no lo voy a decir.
¿Qué a lo mejor se hace?
No, no.
¿Se está haciendo?
[risas] El primero fue Allá tú. Jaime me dijo '¿qué programas volverías a hacer?'. Le di un par por abrir el abanico, pero el primero fue Allá tú. De verdad, es que este programa es el que más me ha divertido. Se han hecho programas más espectaculares y con mayor presupuesto, y que ahora están en otras cadenas... pero el que más me divierte es éste. Al final, después de tantos años trabajando, lo que quiero es divertirme. Los grandes formatos tienen demasiados elementos que te encorsetan, y por mucho que tú te quieras divertir, si estás un talent muy importante, tu trabajo como presentador está limitado porque hay tantas cosas... Y no te digo nada si va en directo, que todo va corriendo. Al final, esto es una fiesta porque es grabado, con lo cual el programa si dura un poco más o un poco menos, no te están machacando 'corta, corta, publi'. Y básicamente, me dejan hacer lo que me da la gana.
"Allá tú es el programa con el que más me he divertido. Tras tantos años trabajando, lo que quiero ahora es divertirme"
¿Cómo ha cambiado Jesús desde la primera edición?
No mucho, pero me cuesta más ponerme los tacones. Pero bueno, dame tiempo que ahora estamos arrancando y no quiero ponerme demasiado loco al principio y estoy tirando al principio por vivir las emociones del concursante y la tensión con el banquero.
¿Qué harás el domingo por la noche y el lunes por la mañana?
El domingo por la noche veré una serie en una plataforma porque a mí no me gustan nada los estrenos, no los veo jamás. El día del estreno no me localiza nadie. Veo el programa antes, ya sé cómo ha quedado, veo lo que me gusta y lo que no, hacemos una puesta en común con el equipo de lo que tenemos que mejorar. Pero el día del estreno me pongo una serie en Netflix. Y el lunes, por mucho que me digo a mí mismo que ya no me importan las audiencias, al final es importante.
¿Lo pasas mal?
Menos que antes porque, al final, que un programa funcione o no, es un cúmulo de cosas. Pero los que estamos en la primera línea de combate, somos a los que ponen el número encima. Y dirán 'ayer el programa de Jesús hizo tanto, no el programa de Gestmusic con 50 personas detrás. Al final se personaliza y te tienes que comer ese momento.
Todo lo del pasado vuelve.
La televisión está viviendo un cambio de ciclo. Ahora, todas las cadenas se han lanzado a buscar formatos clásicos, que gustaron mucho, que funcionaron y que quieren volver a probar. Es que se ha puesto de moda y a mí me beneficia, tengo muchos grandes programas que podrían volver.
¿Crees que sería más complicado para ti entrar en la televisión ahora?
Es que ahora hay muchísima más competencia en todo. Hace 30 años era todo más sencillo, más pequeños y menos gente. Ahora hay miles de programas. Llegar a convertirte en un presentador de referencia, a lo mejor es más complicado.
¿Qué crees que fue lo que no funcionó en la etapa de Allá tú en Cuatro?
Gestmusic hace muy bien los concursos y lo tenían muy digerido. Cuando lo hice por primera vez, Montse Claros, la directora, es la persona que más sabe de concursos de este país. No me da miedo decirlo, con respeto a todos los demás. Ella es el puto número 1, y yo he trabajado con muchos. Es que lo hace muy bien, tiene un talento natural para entender la emoción, el ritmo, cómo llevar el presentador... Yo fui muy feliz haciéndolo y noté desde el primer día que esto funcionaba muy bien.
Cuando llegamos a Madrid, tenía un buen equipo, pero no entendieron la esencia del programa. No funcionó porque desde el principio no teníamos los mimbres para que funcionara. No eran ellos, no era Gestmusic, era otra productora que lo hizo con todo el cariño. El banquero de Madrid no se enteraba de nada. Por eso no funcionó. Porque el casting era bueno, el plató era igual, el formato era el mismo, pero cuando sonaba el teléfono... Yo tengo una relación con el banquero, pero con el de Madrid no tuve ninguna.
¿Viste las ediciones que presentó Silvia Jato y Arturo Valls?
Vi algo. Tampoco soy muy de ver lo que no hago yo cuando lo hacen otros lo que yo hacía. No he visto La Voz desde que no lo hago yo; no vi Operación Triunfo cuando no lo hacía yo porque me da mucho coraje. Son programas a los que quiero mucho, a los que les he dado parte de mi vida, de mi alma y de mi corazón, y no me gusta cuando lo hacen otros.
¿Lo sufres?
No me importa decirlo. Cuando La Voz se fue de Mediaset, y mira que soy íntimo amigo de la directora, Marisol Navarro, otra número 1 de los talents, yo sigo hablando con ella, pero le digo que yo no lo veo, aunque últimamente sí que lo he visto un poquito. Un ratito porque Sebastián Yatra me cae bien.
¿Cómo estás viviendo los cambios en Mediaset, en especial el fin de Sálvame?
En esta etapa de mi vida lo vivo todo con mucha discreción y es un problema muy complejo, y creo que ninguno de los que trabajamos en la empresa debemos de meter más cizaña ni añadir comentarios que no van a ayudar. Además, es que desde Navidad, cuando se produjo la salida de Paolo Vasile y la llegada de la nueva cúpula directiva, es lo primero que hago y en Barcelona, lejos del ruido que hay en Madrid. Yo he estado muy tranquilito en casa asistiendo a todo como un espectador. No lo he vivido desde dentro ni en primera persona. Hablo con Jorge, pero son conversaciones privadas, y mantengo una buena relación.
"No soy muy de ver los formatos que presentaba antes, aunque sí que he visto un poco de 'La Voz Kids' porque Sebastián Yatra me cae bien"
¿Cómo está Jorge Javier Vázquez, anímicamente?
Es que no voy a hablar nada, de verdad. Prefiero que hablemos de Allá tú y cuando Jorge tenga que hablar, que hable.
¿Has vivido algún momento similar al que está sufriendo Jorge Javier?
Todos tenemos momentos complicados en nuestras carreras, de que no encuentras el formato que te encaja. Yo he tenido muy malos. Yo tuve un momento que dije '¿hacia dónde tiro? ¿qué hago ahora? Sinceramente, los últimos que hice no me ilusionaban mucho, los hacía un poco por oficio, porque es mi trabajo, tengo un contrato, y yo lo que me mandan lo hago. Soy de los que dicen 'si pierdes la ilusión por lo que haces, es mejor irte'. A mí me quedaba esa cosita de que amo la tele y dije 'ya vendrá, tranquilidad'. Y llegó esto como un milagro que me mandó Jaime Guerra.
¿Has estado a punto de irte de la televisión?
De irme nunca. Tengo un contrato de larga duración con Mediaset que lo respeto al máximo, y además, es que estoy feliz. Me queda mucho tiempo de contrato. Ha llegado Allá tú y espero que para quedarse.
¿Se ha cumplido las expectativas que te pusiste desde esa llamada?
No solo se han cumplido, sino que toco madera, nos están saliendo redondos los programas. No es casualidad, hay un buen casting, hemos trabajado mucho por recuperar la esencia del programa y lo tenemos.
Es inevitable que la gente sienta nostalgia por este programa y piense en la versión de años atrás. ¿Te da miedo esa comparación?
Es que es el mismo programa. La esencia es exactamente la misma, yo soy el mismo, pero el banquero es el mismo ser humano de hace 15 años. Hubo química desde el primer momento.
¿Te animarías a hacer Allá tú de forma diaria?
Sí, me gustaría hacer una tira diaria. También si se sigue haciendo prime time, yo encantado. La tira diaria es más informal, más rápida... porque, claro, en 45 minutos, resuelves el programa. A mí me gusta mucho. Y como Gestmusic son unas máquinas, en cuanto cogemos velocidad de crucero, los programas se graban del tirón. En 10 días de grabaciones, te grabas el mes entero.
¿Qué te parece la versión en directo que hicieron en Francia?
Tinet me da mucho miedo porque es muy kamikaze, y si hay que hacerla, se hace. Me parece que es la versión más complicada de todas porque ahí sí que te están diciendo por el pinganillo 'quedan 3 minutos de programa y quedan 6 cajas por abrir'. Es muy loco y en Francia funcionó como un cohete porque, además de jugarte el dinero, el tiempo corre, y hay que tomar las decisiones muy rápidas. Es muy loco.
¿Tendrás vacaciones merecidas, no?
Cuando acabemos esta tanda de entregas, aunque tengo otros compromisos profesionales, pero luego me iré de vacaciones.
¿Qué te gusta más: mar o montaña?
Un poco de todo. Estoy enganchado al fresco. Antes era más de achicharrarme todo el verano en Baleares y ahora, no sé si es la edad, o el cambio climático, que me tira mucho el norte. Está ya como los yayos. Pero es que es verdad porque lo de pasar calor en Ibiza... me encanta ir, pero una semanita. Ahora digo, el norte, una semana, o dos, o tres porque se está de puta madre, se come muy bien, no hace calor por la noche. Haré las dos cosas.
¿Cómo llevas ahora el cumplir años?
Lo llevo bastante bien. Me ha costado mucho, he tenido todas las crisis, pero creo que ya no voy a tener más. Lo más importante de la vida es cuando acaba el trabajo.
¿Cómo está siendo la relación con la nueva directiva?
No he tenido mucho contacto. He conocido al nuevo CEO, me ha parecido un hombre educado, simpático y amable, pero todavía no me he sentado a hablar de trabajo puro y duro con él. Hemos tenido una reunión cordial, una cena. Solo puedo decir cosas buenas, porque me dijo 'haremos muchas cosas, Jesús', y yo me puse a disposición. Yo le dije aquí estoy para lo que quieras.
¿Te gustaría compaginar Allá tú con otros programas?
De momento vamos a hacer Allá tú, y cuando esté muy rodado, ya veremos. La otra vez que hice Allá tú, lo compaginaba con Operación Triunfo, pero lo hacíamos todo en Gestmusic y era muy fácil, me organizaban la agenda. Por eso lo pude hacer.
Antes explicabas cómo han cambiado los concursantes, ¿en qué notas la diferencia?
En el casting buscamos perfiles que sean expansivos, como dicen ellos, gente habladora, simpática, optimista, abierta... Otro rasgo que tiene el casting es que son buena gente, no buscamos personas conflictivas, que tengan movidas raras, que odien a la humanidad. Todos son personas con buena onda. Eso hace que empaticen muy rápido entre ellos. No queremos gente que se pelee y que gruña.
¿Te verías cogiendo las riendas de una gala en directo como Supervivientes?
Sí. Me vería para hacer cualquier cosa como Supervivientes. Fue un programa con el que disfruté mucho haciéndolo. Y Gran Hermano solo hice el VIP, y si Operación Triunfo o La Voz volvieran a Mediaset, las haría. Volver a hacer cosas con las que he sido feliz y he hecho, las volverías a hacer todas. Y alguna nueva, una idea que tuve con una amiga de Warner.