Los motivos por los que se hace raro ver 'Viernes Deluxe' sin tener a 'Sálvame' en la parrilla diaria de Telecinco
El programa finalizará sus emisiones el próximo 14 de julio, tres semanas después que el otro formato de La Fábrica de la Tele.
7 julio, 2023 01:39¿Saben que esta noche hay Viernes Deluxe? ¿Y saben ya quiénes son sus invitados? ¿Si habrá polígrafo y quién se sentará en él, sobre qué temas le preguntarán? ¿Si habrá alguna información exclusiva sobre la boda de Tamara Falcó, o si por el contrario el protagonista será alguna estrella de nuestro cine y nuestra televisión?
Realmente se hace raro saber que todavía queda Deluxe para rato. O para un ratito, porque será el próximo viernes 14 cuando este programa nocturno dedicado al corazón se emita por última vez. Pero todos tenemos tan asumido en la mente que su hermano Sálvame ha muerto que resulta desconcertante poner la tele y ver a María Patiño, Kiko Matamoros o Chelo García-Cortés hablando de sus temas de siempre.
Sálvame y Viernes Deluxe eran programas independientes, pero complementarios. Mucho. El formato diario de La Fábrica de la Tele se encargaba de cebar quién iría por la noche a contar su vida o milagros, o a sentarse en la famosa máquina de la verdad de Conchita. Por esa misma razón, fue llamativo saber que la pasada semana hubo una entrevista tan deseada como la de Nacho Palau, que se sentaba en el plató por primera vez para hablar de su historia con Miguel Bosé, y que la promoción fuese escasa. Inexistente. Ni siquiera se había actualizado la web del programa el jueves noche para soltar un buen cebo y así conseguir que la gente pusiese Telecinco y no otra cadena. Y para esta semana, tres cuartos de lo mismo.
Al tener el Deluxe delante es como ver al gemelo de un familiar que murió hace poco. Tienes en la televisión algo cuyo espíritu parecía haber acabado para siempre, que fue despedido como si de una ceremonia olímpica se tratase. Ya hemos aceptado tanto que Sálvame se fue para no volver que se hace raro darle calor a su hermano noctámbulo.
Por otro lado, resulta de lo más curioso que la entrevista de Nacho Palau, que tuvo tanta miga, no haya sido analizada al dedillo en las tardes de Telecinco. El que fuese concursante de Supervivientes contó cómo Miguel Bosé aseguró en un juicio que nunca habían sido pareja. Que el cantante le fue infiel y que él también cometió deslealtades. Que Bosé era celoso, pero que siempre le prestó ayuda en todo. Y tantos y tantos puntos.
Por no hablar del polígrafo al que se sometió José Manuel Parada. El que fuese presentador de Cine de Barrio se sentó en la máquina de Conchita Pérez para desvelar detalles de aquellos años mozos en los que fue pareja de Chelo García-Cortés, en los que hicieron tríos y orgías. No faltaron referencias a Bárbara Rey (que parece que ya no está vetada), o incluso al rey emérito.
En un par de momentos José Manuel quiso cortar las preguntas, diciendo que no se le habían formulado así. Acusando al programa de manipular, en otras palabras. Pero daba igual todo lo que pasaba en aquel plató. La media de la entrega no llegó al millón de espectadores, y nada de lo que se dijo allí tuvo mucho más alcance que alguna pincelada en Fiesta y poco más.
Lo que pasa en el Deluxe parece que ya se queda en el Deluxe. Sin Sálvame, no hay persona encargada de diseccionar al milímetro cada frase, gesto y detalle. Ya no tiene recorrido, es algo fugaz. El Deluxe ha terminado siendo un náufrago, que mueve sus brazos por última vez antes de hundirse.