En ninguna temporada de Drag Race España ha habido una concursante tan claramente favorita para llevarse la victoria como Pitita en la actualidad. La artista barcelonesa lleva ya tres programas alzándose como vencedora, y desde la semana pasada, casi no tiene competencia. La única que le hacía sombra, con dos programas ganados, era la andaluza Pink Chadora, pero salió eliminada la pasada semana tras jugarse la permanencia en un lipsync en el que apostó por hacer el robot.
De esta forma, solo quedan Bestiah y Vania Vainilla con una victoria y Pitita con tres como claras aspirantes a la corona. Hornella Góngora ha recibido muy buenas críticas a lo largo de toda la competición, nunca ha estado en la cuerda floja, y todavía tiene posibilidades de ganar algún programa y colarse en la final (y rozar la gloria). Por estadística, parece poco probable que Clover Bish y la recién repescada Kelly Roller se puedan llevar la temporada y los 30.000 euros de premio, además del viaje a Malta, la corona y el cetro y el año de maquillaje.
Ciertamente, Pitita está siendo una revelación en la temporada, y es la fashion queen del presente curso. Tiene un gusto exquisito para la moda, está cargada de referencias y sabe coser muy bien (aunque a veces reciba ayuda, pero se le olvide, como le sucedió con Visa). Sin embargo, no tiene la corona garantizada como tal, según nos demuestra la propia historia de la franquicia.
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Un claro ejemplo lo tenemos en Drag Race Holland, temporada 2. Keta Minaj consiguió tres victorias, una de ellas a medias con Vivaldi, pero cayó eliminada en justo en la gala previa a la final. Aquella temporada la terminó ganando Vanessa Van Cartier, quien solo había sido la mejor en un episodio, a pesar de que su compañera y rival My Little Punny sí tenía dos ‘win’. Ivy Odly ganó la temporada 11 de Estados Unidos con solo una victoria frente a Brooke Lynn Hytes, que tenía 3. Kylie Sonique Love se llevó RuPaul’s Drag Race All Stars 6 con solo una victoria. Y no olvidemos que en Italia la primera temporada se la llevó Elecktra Bionic, que no había sido la mejor en ninguno de los episodios.
En teoría, para ganar Drag Race España hay que ser la mejor del capítulo final, y vencer en una sincronización de labios contra una rival (o dos). Y ahí Pitita sabemos que es donde no es tan feroz como en la pasarela. La semana pasada tuvo que batirse contra Pink Chadora y Pakita y triunfó, pero tampoco hizo nada sobresaliente que nos haga pensar que en la gran final se va a comer con patatas a quien le pongan por delante. Quizá está guardando sus mejores cartas y nos deja entonces a todos con la boca abierta.
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En las redes sociales, muchos seguidores están considerando que la producción favorece a Pitita. Nada nuevo bajo el sol. Igual que no hay una canción ganadora de Eurovisión a la que no se acuse de plagio, no hay temporada de Drag Race, da igual el país, en el que no se señale la mano de la producción para hacer que unas reluzcan y otras padezcan a la sombra.
Pitita Queen está demostrando, por talento propio, que si está despuntando en la temporada es porque se lo curra. ¿Que en el desafío de terror estuvo mejor alguna otra compañera? Quizá. Para gusto los colores, y el jurado votó lo que consideró oportuno, y ahí no se puede hacer nada. Pero ya ha escrito su nombre con letras de oro en la historia internacional del programa, como una de las que más victorias ha amasado, y de la que mejor gusto ha demostrado. De las que hace llorar al jurado con su gusto por la moda cuando corresponde, reír en otras. Y encima, el edit le está dando un aire de villana por momentos, lo que la hace todavía más encantadora como personaje televisivo. La que (en apariencia) ningún compañero desea que gane. ¿Terminará siendo Pitita, pues, la Virgina Maestro del arte drag?