Este viernes se emite una nueva entrega de Tu cara me suena, la tercera gala de la presente emisión. Y para promocionarla, laSexta ha recibido en el programa Zapeando a Anne Igartiburu, una de sus concursantes, y que esta noche pasará por el clonador para emular a los Pet Shop Boys, tal como decidió el pulsador.
En su charla con los colaboradores, Anne se ha sincerado sobre lo que representa para ella ser concursante de un formato así, pues lo habitual es que sea ella quien presente a los participantes de espacios similares. “He cambiado de rol: de ser presentadora a estar en una posición que no dominas, en la que tiemblan las piernas. Es dar un paso por el que decides que vas a jugártela”, explicaba la comunicadora vasca.
Entonces Dani Mateo quiso preguntarle por uno de los momentos más complicados de su carrera: “Necesito que me hables del momento con John Cobra”, le pidió el conductor de Zapeando, que incluso bromeó conque hagan una colaboración musical como la de Shakira y Bizarrap. “He vivido muchos momentos, pero sí que es verdad que en aquel entonces las redes comenzaban a nacer y John Cobra salió y... Qué cosas dijo”, explicaba Igartiburu.
El momento al que se refería sucedió en el año 2010. TVE decidió abrir un proceso de selección del artista que representase a España en Eurovisión a través de Internet, y los más votados llegaron a una gala titulada Destino Eurovisión. Uno de ellos era John Cobra, quien se había hecho conocido en las redes sociales por sus actitudes polémicas y su afán por buscar el foco. Presentó el tema ‘Carol’ y consiguió el apoyo de un conocido foro de Internet, que quería trolear el certamen.
Al terminar su interpretación, el público presente en el plató comenzó a abuchear a John, que se echó la mano a la entrepierna y empezó a gritar: “¡Comedme la polla! ¡Maricones!”. Anne, por su parte, intentaba calmarle, diciéndole “cariño, tranquilo”.
“Yo tenía a los directivos de la cadena pidiéndome que sacara a ese impresentable”, ha recordado hoy en Zapeando sobre el incidente. “Yo estaba diciéndole que estuviese tranquilo, en esa forma que tengo de estar monísima y de no moverme. Pensé: 'Te pego un guantazo'. Pero ya le agarré y vinieron los de seguridad y se lo llevaron. Fue un momento supercomplicado”, añadía.