La franja de la sobremesa ya se ha consolidado como el segundo prime time de la televisión

España tiene fama de ser uno de los países más trasnochadores de Europa. De hecho, según un estudio de ACNielsen realizado entre 15.000 consumidores, somos los que más tarde nos acostamos tras Portugal. El 65% afirman estar aún despiertos cuando el reloj marca la medianoche. ¿Significa esto que la gran mayoría está frente al televisor? No. Al menos no visionando algún programa, serie o película que emitan algunas de las cadenas generalistas. El consumo sigue en caída libre al marcar las 23 horas.

Teniendo en cuenta cuál es el programa de entretenimiento más visto del horario estelar, El Hormiguero, se puede deducir que mucha gente que está viendo la televisión, la apaga al terminar el programa de Pablo Motos. O decide pasarse a ver una serie o película en algunas de las tantas plataformas de pago.

Y es que, opciones como Netflix, HBO o Amazon Prime han revolucionado para siempre las audiencias de la televisión regular. Cobrando cada vez un mayor peso en el consumo de los hogares, en detrimento de la audiencia que antes conseguían los programas de prime time.

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Entendemos por prime time la franja horaria que va desde su access hasta su finalización. O lo que es lo mismo, más o menos entre las 20 horas y las 23:30 horas, cuando empieza la que sí que es desde hace años la franja más devaluada de la televisión: el late night.

Es durante estas horas donde Antena 3 domina desde hace años con su denominada 'milla de oro', la más vista por los espectadores, y donde concentra, casi siempre, las tres emisiones más vistas del día: Pasapalabra, Noticias 2 y El Hormiguero. Un fortín capaz de entretener entre 2,5 y 3M de espectadores cada día. Ninguna cadena le tose. Lo que ayuda, también, a que Antena 3 aproveche para vender en dicha franja la publicidad más cara de la televisión.

El caso Arguiñano 

Arguiñano, imbatible

Sin embargo, las ofertas que se emiten a partir de las 23 horas, salvo honrosas excepciones -también porque empiezan antes, como Supervivientes o Tu cara me suena-, se hunden. De hecho, esta temporada hemos podido comprobar como productos que han rendido por debajo de lo esperado, como El círculo de los famosos, han conseguido liderar la última hora del prime time del día con ni tan siquiera llegar al millón de espectadores.

Otros formatos como La última y me voy, u otros con mejor rendimiento como Hermanos, La isla de las tentaciones y MasterChef alcanzan, como mucho, el millón y medio de espectadores. Y es que, hasta hace no mucho esta cifra hubiera sido la principal e inmediata razón para que un programa fuese cancelado por baja audiencia.

Hoy en día vale más la cuota conseguida o el titular de haber sido 'líder de su franja' para vender como éxito un producto. Sí, éste reúne un buen puñado de espectadores, pero lejos de los 2,5M o 3M que hasta hace años se le exigía, por ejemplo, a una ficción para renovar por una temporada más. En la actualidad, los 1,6M conseguidos por Mentiras en 2020, o los 1,5M de 2021 de La cocinera de Castamar, son todo un objetivo a conseguir por las nuevas ficciones para ser consideradas productos de éxito en su emisión en abierto.

Y en medio de estos bajos datos de la gran mayoría de productos que se emiten en prime time -y que solo pueden salvar programas como TCMS, algunas películas y grandes eventos deportivos o de entretenimiento como Eurovisión-, hay una franja que ha conseguido erigirse como el 'segundo prime' de la televisión. Gracias a reunir, aquí sí, a una gran masa de personas frente a la televisión: la sobremesa.

Cuando hablamos de sobremesa incluimos el access sobremesa y la sobremesa televisiva propiamente dicha, es decir, la franja que va desde las 13 horas hasta las 17:30 horas de la tarde apróximadamente.

Los seriales de sobremesa llegan a superar a las grandes series de la noche

La veterana Amar es para siempre

Es aquí cuando el número de personas que se encuentran viendo la televisión lineal es cada vez más importante. Ya no solo porque Antena 3, Telecinco, La 1, laSexta o Cuatro batallan entre sí, sino que tienen en frente a un arsenal de canales autonómicos donde durante estas horas también emiten programas de gran éxito de audiencia.

Un ejemplo lo tenemos en Cocina abierta de Karlos Arguiñano, que se emite cada día cerca de las 13:25 horas en Antena 3. Su audiencia oscila entre los 800.000 y los 900.000 espectadores. ¿Qué significa esto? Que supera a otras emisiones mucho más ambiciosas y, sobre todo, más caras como Desaparecidos, Déjate querer o Días de tele, por ejemplo. Productos que lucen sus cadenas en pleno prime time, pero que no llegan a aglutinar frente al televisor a los mismos espectadores que ven cocinando a Arguiñano.

Otros éxitos que superan en muchas ocasiones a los programas, series y películas que emiten las grandes cadenas en horario de máxima audiencia, también se emiten en la sobremesa. Otro de los casos más llamativos es La ruleta de la suerte con 1,6M, Pecado Original con una audiencia in crescendo de 1,5M, u otros formatos como Ya es mediodía y Sálvame Limón, con 1,1 millón de espectadores.

Si a estas audiencias les sumamos los más de 2M de Noticias 1 en Antena 3, Informativos Telecinco 15 h, con 1,4M y, el Telediario 1, la masa de espectadores que ve la televisión a estas horas supera a la que se supone es la franja de más relumbrón de la televisión: el prime time.

No menos importante es el caso de lo que está dando de sí una de las batallas más emocionantes de la temporada: la de los seriales españoles de la sobremesa. Cada día, reúnen una media de un millón de fieles tanto Amar es para siempre como La promesa viviendo, de momento, en perfecta armonía. Con un presupuesto mucho menor que las series de prime time, pueden presumir de superar a muchas que se estrenan en este horario, como es el caso actual de Desaparecidos.