Sin duda, Isabel Pantoja se ha convertido en una de las grandes estrellas del Baile de la Rosa que organiza la familia real de Mónaco en el principado. La tonadillera fue una de las exclusivas invitadas al encuentro y tenía muy claro que no quería que la eclipsara nadie ni nada. La cantante sevillana no tuvo reparo en vetar al equipo del programa Fiesta, el cual se acercó para recibir a la artista y desearle suerte en esta noche tan especial.
Así lo reveló Silvia Álamo, reportera del programa de Unicorn Content, quien reveló que pudo estar bastante cerca de la tonadillera. “Hemos estado tan, tan cerca de Isabel Pantoja, estuvimos en el aeropuerto de Niza, la esperamos a su llegada, estuve frente a frente con ella”, declaró la periodista a Emma García desde los exteriores del hotel donde Pantoja se alojaba.
El motivo por el que tuvo que hacer la conexión en la calle fue por petición expresa de la folclórica, quien solicitó al hotel vetar al equipo del programa, dándole el nombre concreto de la reportera. “Ahora nos ha vetado y no puedo entrar dentro de este hotel donde se está alojando antes de ir al Baile de la Rosa. Literalmente estoy vetada por ella, nos lo ha dicho la gente de seguridad, saben quién soy perfectamente”, dijo algo decepcionada Álamo.
El programa mostró los momentos previos al aterrizaje de Isabel Pantoja al microestado europeo. Lo cierto es que Álamo estuvo muy cerca de ella, dado que pudo esperarle en la sala privada de espera y las cámaras de Telecinco pudieron captar el momento en el que la sevillana bajaba del avión.
Al poco de salir hacia el coche privado que la esperaba, la cantante fue abordada por la reportera y su cara fue de visible enfado. “Ella llamó cuando salimos del aeropuerto porque me vio y dijo ‘por favor, va a llegar una chica que me está siguiendo con el taxi, se llama Silvia, es periodista y es así…’ y cuando llegué en el taxi me reconocieron enseguida y me dijeron que Isabel Pantoja les había pedido que no me dejasen entrar”, explicó Álamo.
A pesar del incidente, lo cierto es que Isabel Pantoja derrochó carisma en el Baile de la Rosa, al que acudió con su hermano Agustín y en el que compartió mesa con la mismísima Shirley Bassey, a la cual la tonadillera admira. La temática de este año era rendir un homenaje a Bollywood. De ahí, que la cantante fuese ataviada con un diseño de Isabel Sanchís en el que buscó fusionarse la cultura india con el toque propio español.
Un diseño en tonos rosa, con cinturón y flores grandes en el hombro izquierdo y la manga derecha, dado que el vestido buscaba ser una mezcla del tradicional sari indio y el traje típico de las sevillanas. Su look fue uno de los más aplaudidos de la noche y que sirvió también como broche de oro para la brillante etapa profesional que está viviendo la tonadillera, dado el éxito rotundo de su gira por Estados Unidos y las negociaciones que está teniendo con una plataforma para realizar una serie documental sobre su vida.