Anabel Alonso comenzó su tercera aventura en MasterChef Especial Navidad sin imaginar que se llevaría el trofeo de cristal y los 25.000 euros, pero parece que el esfuerzo en cada cocinado y la experiencia le han servido para conquistar esta primera entrega de especiales.
La actriz confiesa a BLUPER que con el final del programa culinario tiene "la sensación del trabajo bien hecho", sobre todo por la dificultad de esta edición. Aunque no descarta participar en otros espacios televisivos (ya lo ha hecho en Tu cara me suena), confiesa que jamás se atrevería con un reality de supervivencia.
La espontaneidad, el humor y la naturalidad han sido las señas de identidad de Anabel en los programas en los que ha participado, algo que transmite cada día en sus redes sociales ante los casi 300.000 seguidores que posee. BLUPER charla con la última ganadora de MasterChef sobre su paso por el talent y su carrera profesional.
A la tercera va la vencida. ¿Cómo te has visto en este especial de MasterChef Navidad?
Me he visto sorprendentemente bien. Veo cómo que he aprendido, y eso que estuve en tres pruebas de eliminación, que no fueron nada fáciles. Porque yo decía 'madre mía, una semana con el delantal negro y otra y otra...'. Y las pruebas tenían nivel, no eran pruebas sencillas. Realmente me quedo con la sensación del trabajo bien hecho. También he de decir que no me esperaba ganar, ni mucho menos, la verdad.
Te has dejado literalmente la piel
Totalmente (ríe). Sangre, sudor y lágrimas. No por ese orden, pero todo.
¿Cómo ha sido trabajar con los niños de MasterChef Junior?
Era muy divertido, porque estaban los que sabían, los que ayudaban, los que les ayudaban, los adultos, los serios, los sensatos... Con lo cual aquello era una lotería, porque claro, cuando te tocaba uno que te solucionaba era guay, pero luego tenías a alguno que liaba las cosas y era tremebundo. También aprendías a escucharles a ellos, a tenerlos controlados y a los que eran trastos pues a tener paciencia.
Has estado en más programas de televisión, pero ¿te atreverías con un reality de supervivencia?
Pues la verdad es que eso es un reto tremendo, no sé si estoy preparada y creo que para eso también te tienes que preparar un montón y tener mucho espíritu de sacrificio y de aguante. Sería en el único reality en el que igual podría pensármelo. Supone un reto, pero vamos, casi existencial, y no sé si me considero con la fuerza.
¿Y en qué programa que no hayas estado te gustaría concursar?
Así de programas de entretenimiento me gustaría participar en Mask Singer, porque sería divertido que nadie sepa quién eres y estar ahí... Me parece guay.
El humor es algo que te caracteriza y que se ha visto en MasterChef, ¿crees que hay límites a la hora de hacer humor?
Hombre, yo creo que siempre ha habido, lo que pasa es que ahora hay como demasiadas susceptibilidades. A ver, yo creo que hay que tener más sentido del humor. Indudablemente hay cosas que te pueden hacer gracia o no, incluso algunas te molestan o no, pero hay que tomarlo como lo que es, como humor, y entonces no ofenderte como si lo dijeran en serio.
Hace pocas semanas, Josema Yuste dijo que por qué "no se podía hacer humor sobre gremios como el homosexual"
¿Gremios? Pues vamos, tampoco son oficios... Más allá de eso, se puede hacer humor, pero ¿por qué siempre es con el más vulnerable y el más machacado? No sé, habría que darle una vuelta a eso.
Eres una persona muy activa en redes sociales. ¿Cómo te llevas con los haters o con los comentarios negativos?
No me los tomo en serio para nada. Además, yo me río un montón porque en general el 99% son anónimos, que ni van ni vienen. Solo por eso hay odiadores que van a saltar y a molestar, entonces no me lo tomo en serio. Y cuando el contexto es para reírme.
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También te mojas en política y en defender tus ideas, que es algo que muchas otras personas famosas no hacen
Se crece a la hora de intercambiar ideas con alguien cara a cara y que además, a mí me encanta que la gente piense distinto a mí. Eso es una maravilla y eso es lo que tiene que ser. Cada uno que vea la vida como quiera, pero siempre desde el respeto y de poder hablar, intercambiar opiniones. Twitter no es el sitio para tener grandes debates. Cada uno tiene sus ideas, no sé, nunca le puedes gustar a todo el mundo. Lo que no me gusta es que deje de gustarle a alguien como actriz por cómo pienso. No me gusta que hagan esas cosas, porque yo si voy a una tienda no le pregunto al dependiente a quién vota.
De hecho, hace pocos días pedías más recursos para la sanidad pública
Las redes también sirven para eso, como altavoces para reivindicar, para reclamar o simplemente para defender algunas causas de alguna gente que de repente piden apoyo y repercusión. Yo creo que está muy bien y que es como una gran democracia en ese sentido, porque puedes decir lo que piensas y para llegar a la persona que quieres dirigirte, cosa que por otro medio no podrías haber.