La décima temporada de MasterChef celebraba ayer su semifinal, o lo que es lo mismo, el último episodio con las habituales dinámicas de la competición. En la primera prueba, que consistía en replicar un plato del gran chef Pedro Subijana, María Lo fue la mejor valorada, y se llevó un gran premio: un contrato de trabajo de un año en las cocinas del resort Catalonia Gran Costa Mujeres, en Cancún.
Ya en la prueba de exteriores, quien se terminó robando el foco, pero no en el mejor de los sentidos, fue David, quien tuvo un desencuentro con Pepe Rodríguez. David había cometido un fallo mientras cocinaba con Patri. “Dale caña, David. Qué postre, ¿eh? Estarás orgulloso, ¿verdad?“, le decía Pepe al concursante, quien respondió con sarcasmo: “Orgullosísimo. A más no poder. ¿No me ves rebosante de felicidad?”.
Rodríguez siguió entonces echando leña al fuego, y le dijo tanto a Patri como a David: “no sabéis multiplicar. Creo que no sabéis ni leer, que es lo más preocupante”. Según el juez, por esos problemas tan elementales la receta no había salido bien. Pepe siguió con sarcasmo cuando, a la hora de emplatar, les decía que tenían que limpiar las cocinas. Ahí fue entonces cuando David, que ya había sufrido un episodio de ansiedad en el concurso, se encaró con el de El Bohío.
[¿Ha cumplido 'MasterChef' con el objetivo de audiencia que le marcó RTVE en su último contrato?]
“Ya está, ¿no, Pepe? Ya está. Estoy cabreado, ¿qué pasa? ¿No puedo estarlo? Si me faltan al respeto, también”. Pepe preguntó que quién se lo había faltado. “Me lo has faltado tú, diciéndome que no sé leer, que no sé escribir, que no sé calcular. Déjame tranquilo, de verdad te lo digo”, le reprendía. “Una falta de respeto es hacer un helado mal pesado, hacer mal cinco bizcochos” decía entonces Pepe Rodríguez, mientras que David solo pedía una y otra vez que le dejase en paz. “Soy humano, tengo mucho carácter”, se justificaba David en el confesionario del programa. Más tarde, ambos hacían las paces. “¿Qué crees, que me iba a quedar con lo malo? Me quedo con lo bueno”, aseguró Pepe en ese sentido.
En las redes sociales, la audiencia se dividió entre aquellos que consideraban que David debería ser expulsado por su mal comportamiento y los que señalaban a Pepe por tocar las narices por encima de lo necesario a los aspirantes.
María Lo se convirtió, de nuevo, en la mejor valorada, y consiguió el primer pase hacia la gran final, y Adrián, Verónica, David y Patricia se enfrentaron a la última prueba de eliminación. El reto consistía en realizar un postre del chocolatero Damian Allsop. Ahí falló Patricia, que estuvo muy desconcentrada, y terminó por ser la nueva expulsada. Así, Adrián, Verónica, David y María Lo competirán la semana próxima por lograr el título de ganador.