Fallos de sonido, letras olvidadas, pánico escénico: el irregular resultado del ‘Sálvame MediaFest’

Este miércoles, Telecinco estrenó su ansiado Sálvame MediaFest, el festival de música que pondría a cantar a los colaboradores con estrellas de la canción. La idea, en principio, era bastante buena, ya que el programa iba a devolver la música al prime time de la televisión, pero luego, el resultado, ha sido demasiado irregular. Fallos de sonido, letras olvidadas o problemas con los invitados enturbiaron lo que debía ser una gran verbena de luz y de color.

Nada más arrancar la gala, algunos pequeños detalles nos adelantaban que aquello no iba a ser precisamente un producto audiovisual pulido. Desde la actuación de Varry Brava, con una realización que mostraba a invitados como Las Ketchup con cara de desidia, hasta esas entrevistas en las que no se escuchaban las respuestas, como la breve charla de Adela González con Cristina del Valle.

En general, ha quedado un producto bastante mediocre, con actuaciones en las que no se escuchaba la voz de aquel que estaba cantando y entrevistas en las que solo se veían moverse unos labios. Resultaba muy incómodo de seguir desde casa, y no fue un fallo de los primeros minutos que se solucionase sobre la marcha. Los fallos con los niveles de voz llegaron para quedarse.

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En los vídeos de los ensayos veíamos al productor Alejandro Abad siendo crítico (aunque con sorna) con los invitados, a los que enseñaba a cantar, en medida de las posibilidades. Y al final resultó que el eurovisivo estaba cargado de razón, y que todos lo hacían bastante regular. Los periodistas y comentaristas de Sálvame salían al escenario haciéndose pequeños, con miedo. A Carmen Borrego le dijeron que se le notaba que no lo había pasado bien, aunque ella negaba la mayor, pero esa tónica fue la general. El terror y la incomodidad se veían en muchas caras, y me chocó esto, pues Sálvame ha inventado en muchas ocasiones conciertos similares y creía que todos estarían ya más acostumbrados a prestarse a circos así.

Faltaba una buena integración entre el artista y el colaborador, cada uno iba por su lado, y no solo en lo vocal. Miguel Frigenti, como apuntaron también los jueces, desaprovechó su actuación con Ladilla Rusa, pues el dúo de Tania Lozano y Víctor F. Clares es un torrente de energía, y Miguel no terminaba de encajar con ellos. Terelu era un parche con Azúcar Moreno, y aunque desafinó como ella sola, sí que aplaudo a Laura Fa, que parecía disfrutar del momento. Su estampa junto a Amistades Peligrosas cantando ‘Estoy por ti’ eran la de tre colegas de fiesta en un karaoke.

Los colaboradores parecían invadidos por el pánico escénico, y los fallos y los olvidos de las letras fueron también una constante. Destacar ahí a Rafa Mora y cómo el grupo Niña Polaca supo encauzarle cuando estaba más perdido que el barco del arroz.

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Por otro lado, hay que mencionar la encerrona que hicieron al cantante Raúl, que cantó con Alonso Caparrós, y al que varios colaboradores afearon que cantase demasiado alto y opacase a su compañero. El camino para futuras ediciones del MediaFest no es la de criticar a los famosos que se prestan al espectáculo para dejarlos de poco generosos, la verdad.

La ganadora de la gala resultó ser Carmen Alcayde, y es una hazaña que hay que destacar, pues inicialmente ella iba a hacer un dúo con Rebeca y su tema ‘Duro de pelar’, mientras que María Patiño tendría que sacar su lado urbano con Ptazeta. Sin embargo, María Patiño dijo que era incapaz de cantar ritmos urbanos y que se retiraba del Festival, por lo que Carmen se ofreció a cambiarle el artista… y la jugada le salió redonda, pues, como decimos, fue la mejor valorada de la noche.

Tras su show, Carmen dijo unas palabras que fueron muy aplaudidas sobre su compañera de escenario: “Aquí donde la veis, tiene 22 añitos, le hicieron una entrevista y dijo: ‘Yo canto a las mujeres, porque me gustan las mujeres’. ¿Dónde está lo raro? ¡No hay nada raro!”. Un mensaje de diversidad que repitió al saberse ganadora. “¿Sabes lo que pasa? Es la 01:00 de la mañana, pero a todos los niños que estén despiertos: esta es la vida que quiero que mis hijos hereden. De libertad, de talento y de respeto por los demás”.