Gloria Camila Ortega ha sido uno de los mayores azotes de Rocío Carrasco en Telecinco desde que esta contara su duro relato en Rocío, contar la verdad para seguir viva. La hija de Ortega Cano ha cuestionado en varias ocasiones a su hermana mayor y no ha dudado en censurar la exposición mediática que Rocío ha hecho de sus problemas familiares.

Con el anuncio de la segunda parte de la docuserie, En el nombre de Rocío, Gloria se mostró especialmente crítica y recurrió a la justicia para reclamar los manuscritos de Rocío Jurado que fueron hallados entre las pertenencias de la artista y que han valido como importante base documental para los nuevos episodios.

Ese constante afán por defender, según sus propias palabras, la privacidad y la memoria de Rocío Jurado, contrasta con el protagonismo que ha tomado en los últimos días la influencer en el programa Ya son las ocho, donde no ha dudado en visitar la casa de Montealto en la que residió su madre o la tumba en la que está enterrada, todo ello acompañada de una cámara.

"Homenajes hay muchos y a 'la más grande', más, pero nunca como el que van a ver en 'Ya son las ocho', con los ojos de Gloria Ortega, que se pone las gafas del programa y lo graba todo", anunciaba Sonsoles Ónega el pasado 30 de mayo. Casi un año antes, la presentadora se preguntaba "por qué tienes que volver con una cámara encendida" cuando Rocío Carrasco regresaba a Chipiona tras años sin pisarlo.

Esta doble vara de medir de Gloria Camila ha llamado la atención de muchos espectadores y hasta de algunos de sus compañeros de programa. Es el caso de Alexia Rivas, que al anunciarse este homenaje televisado se preguntaba: "Si fue tan crítica Gloria porque su hermana expusiera Montealto, ¿qué es diferente ahora?". Una duda que hacía saltar inmediatamente a Rocío Flores, presente en plató, para defender una vez más a su tía frente a su madre. "Quizás debas verlo mañana", espetó.

Isabel Rábago también se mostró sorprendida por el cambio de criterio de su compañera: "Mira las vueltas que da la vida. Yo le diría una cosita a Gloria, pero voy a esperar a verlo. Pero si cuestionaba entonces algo...", decía la periodista, a quien Miguel Ángel Nicolás pedía insistentemente que esperase a conocer el contenido para dar su opinión.

Sin embargo, una vez visto lo que grabó la joven cuesta encontrar diferencias con lo que Rocío Carrasco ha hecho en televisión: relatar su vida y mostrar algunos de los rincones más importantes de su pasado. Cabe recordar, además, que ambas lo han hecho cobrando por ello.

Esta doble vara de medir no ha pasado desapercibida en las redes, donde son muchos los espectadores que han criticado que Gloria Camila haga exactamente lo mismo que criticó de su hermana para dar contenido al programa en el que trabaja.

Para evadir el aluvión de críticas, tanto la colaboradora como el programa han insistido en que la joven no ha querido hacer "un show" de su regreso a Montealto tras 16 años sin pisar la casa. De hecho, la cámara sólo grabó el momento en que se dirigía a la puerta para entrar y su reacción al salir de la vivienda, pero lo cierto es que el interés radicaba precisamente en la visita de Gloria y no en la casa en sí, que está abandonada y sin ninguna de las pertenencias de Rocío Jurado, pues los enseres fueron guardados en los famosos contenedores que Rocío Carrasco abrió frente a las cámaras de Telecinco.

Parece, en definitiva, que a Gloria Camila sólo le molesta la exposición de su intimidad cuando no es ella la beneficiada, bien sea económicamente o por imagen, pues cabe recordar que su papel como hermana fue puesto en evidencia por Rocío Carrasco, que  relató el apoyo ciego de muchos de sus familiares -incluida su propia hija- a Antonio David Flores para continuar con el maltrato mediático que denuncia haber sufrido.

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