Antena 3 y Telecinco vivirán este 23 de febrero una batalla de ficción en prime time. Después de que la cadena de Mediaset anunciara que mantendría la emisión de Pasión de Gavilanes para ese día, Atresmedia respondía con un inesperado cambio en su programación, anunciando que emitiría en el prime time de esa jornada el último capítulo de la segunda temporada de Tierra amarga.
Con este enfrentamiento, ambas cadenas persiguen objetivos que van mucho más allá del dato de audiencia que se publique el jueves. Por una parte, Antena 3 ha dado este golpe de efecto para demostrar la fuerza de sus ficciones turcas y, en caso de vencer a Telecinco, reafirmar el éxito del modelo turco. La cadena de Mediaset, por su parte, se enfrenta al reto de confirmar el poder de convocatoria de la telenovela latina y nostálgica.
El estreno de Pasión de Gavilanes el pasado 16 de febrero sólo logró liderar con la emisión de su segundo capítulo, que cosechó un 18,7% de cuota con 1.871.000 espectadores. La doble emisión completa firmó un 16,6% y 2.188.000 espectadores, unos datos que están lejos de lo esperado para una apuesta tan ambiciosa en la que Mediaset ha hecho un notable esfuerzo económico, tanto para adquirir los derechos de emisión como para la promoción de la serie.
Tierra amarga, por su parte, despide su segunda temporada en plena forma. La ficción turca lucha de tú a tú con Sálvame cada tarde y, tras cerrar enero como su mejor mes histórico, sigue despuntando en febrero. Tanto es así que, el pasado martes día 8 batió su máximo histórico de cuota con un 19%.
Sin embargo, la serie turca aterriza 'a ciegas' en el prime time, una franja mucho más complicada que la tarde, por lo que está por ver si consigue arrebatarle el liderazgo a los 'gavilanes'. Sea como fuere, esta estrategia parece presentar muchas más ventajas que inconvenientes para Atresmedia, pues emitir el final de temporada en prime time es una oportunidad para atraer a nuevos públicos que se sumen a la legión de fans de la serie vespertina, que tras este pulso nocturno continuará su emisión diaria con normalidad.
Con esta batalla televisiva, Atresmedia y Mediaset enfrentan dos modelos de negocio muy distintos. La primera se convirtió en pionera al importar Mujer, que cosechó un éxito tan arrollador como inesperado. Desde entonces, la cadena de San Sebastián de los Reyes se ha alzado como referente de la ficción turca en España, con varios títulos que han conquistado al público y que siguen funcionando.
En el lado opuesto se encuentra la compañía de Paolo Vasile, que sigue explorando posibilidades para recuperar el trono de las audiencias que su modelo de entretenimiento, basado principalmente en el corazón y la telerrealidad, ha perdido frente a su rival. De esta manera, la emisión de Pasión de Gavilanes parece responder más a un enésimo intento desesperado por dar un golpe en la mesa que a un plan concreto para dar un giro de timón.
Este miércoles se vivirá, en definitiva, uno de esos grandes duelos televisivos que acaparan la atención de los medios especializados al día siguiente. De momento, parece que Mediaset no guarda demasiada confianza en su apuesta, pues optará por emitir tres episodios seguidos de Pasión de Gavilanes en su segunda semana en emisión, alargando así la telenovela colombiana hasta las 1:15 horas. Habrá que ver cómo acaba afectando esta estrategia a la ficción que estaba llamada a repetir el fenómeno que supuso la emisión de su primera temporada hace dos décadas.
[Más información: Telecinco contraprograma para emitir un tercer episodio de 'Pasión de Gavilanes' este miércoles]