Después de ocho años guardando silencio, curiosamente unos meses después de que Raquel Sánchez Silva presentara una demanda contra Mediaset Italia por emitir un programa que daba una imagen tendenciosa de la presentadora, Mediaset España ha decidido romper su silencio en el caso Biondo.
Lo ha hecho desde programas como Sálvame, Ya son las ocho o Todo es mentira, que este miércoles dedicó su entrega a "exponer dos realidades, la de la familia y la de la presentadora" para dilucidar si la muerte de Mario Biondo fue un suicidio o un asesinato, según se justificó Risto Mejide al principio del programa.
"Los juicios no se hacen en televisión, sino en los juzgados. Aquí no vamos a determinar si es culpable o inocente", añadía el publicista introduciendo la idea de la culpabilidad en el debate, a la par que reclamaba de una manera de lo más cínica "respeto personal y profesional" hacia la presentadora de Maestros de la costura.
Sin embargo, lo cierto es que este programa emitió imágenes que no aportaban nada al caso, como las de la presentadora llorando frente a la tumba de su marido, o de sus declaraciones ante la justicia hablando de su vida íntima, que no han hecho más que ayudar a que se trace un perfil dudoso sobre la extremeña y que se vuelva a crear un juicio paralelo en redes sociales.
De hecho, sólo hay que echar un vistazo a los perfiles en Twitter de Mediaset España para encontrar nuevos mensajes injuriantes y calumniosos contra la presentadora (que no vamos a reproducir por respesto a la misma), que ayudan a propagar la idea de que es presunta sospechosa en el caso y que añaden un sufrimiento añadido a la viuda.
Precisamente, la periodista decidió denunciar a la familia de Biondo por verse "sometida a una campaña de acoso a través de redes sociales y con la ayuda del Grupo Mediaset".
"Mediante el presente escrito vengo a interponer denuncia contra Dña Santina, D. Alessandro, D. Filippo y Dña Emanuela Biondo, Grupo Mediaset, así como contra las personas administradoras de los perfiles de Instagram y Facebook contenidos en el presente escrito por un delito de odio, un delito de amenazas, un delito de calumnias y un delito de injurias, todos ellos del Código Penal", decía el escrito.
Para los abogados de la presentadora, la emisión en el canal italiano Italia 1 (de Mediaset) de una edición especial del programa Le Iene (Las hienas) titulada 'Mario Biondo: un suicidio inexplicable' construye un "relato sensacionalista, lleno de mentiras y tergiversaciones".
"A lo largo de más de dos horas del programa se lleva a cabo una revisión tendenciosa y con el objetivo de propagar fundamentalmente dos ideas: i) la muerte del Sr. Biondo no pudo ser un suicidio sino un asesinato; y ii) Dña Raquel Sánchez Silva es sospechosa de dicha muerte", añadía.
A raíz de la emisión de este espacio, según los abogados, Raquel Sánchez Silva recibió a través de redes sociales toda clase de "mensajes injuriantes, calumniosos, hostigadores y amenazantes". Lo mismo que está empezando a suceder ahora.
Lo más sorprendente del asunto es que hace tan sólo unas semanas, al abordar el caso de Dolores Vázquez, desde Sálvame se habló de los peligros que conllevan trazar determinados perfiles sobre personas desde los medios de comunicación masivos. Porque, ¿qué aportan al caso las opiniones de Belén Esteban? ¿Cuán riguroso es?