Este jueves Isabel Rábago fue la concursante expulsada por la audiencia de Secret Story. Su marcha, sin embargo, ha quedado ensombrecida por un ataque de ansiedad que sufrió en directo, durante los primeros minutos de la gala, cuando le pusieron un vídeo de una broma de mal gusto que le hicieron Miguel Frigenti y Adara Molinero, y que ya le generó un mal trago.
Frigenti y Adara fueron a su habitación en mitad de la noche y le dieron un grito fuerte, y le pusieron sobre la cama un muñeco que parecía un esqueleto. Ella llevaba un antifaz puesto para dormir y no vio el muñeco, pero se asustó por el grito en sí.
Isabel salió a ver quién había hecho semejante canallada y escuchó a Adara y Frigenti reírse, lo que le provocó entonces lo que parecía un ataque de ansiedad y acudió al cubo a calmarse, y según Cristina Porta tuvo que recibir medicación. Finalmente, la periodista terminó durmiendo en esta habitación de la casa, tras llorar e incluso gritar.
Al ver el vídeo de aquel momento Isabel sufrió un nuevo ataque de ansiedad y comenzó a respirar de forma entrecortada. Carlos Sobera, el presentador de la gala dado que Jorge Javier Vázquez está de baja, intentó tranquilizarla, y ella volvió a marcharse al cubo para superar el trago. Adara y Frigenti fueron interrogados por la broma y ellos pusieron en duda el ataque de ansiedad, pues no creían que un muñeco pudiese provocar esa situación.
Más tarde Isabel Rábago se jugó la expulsión contra Cristina Porta, pero la audiencia decidió elegir a la periodista deportiva para continuar en la casa. Rábago aseguró sentirse muy satisfecha de su concurso, y se reveló que su secreto, tal como ya indicó Julen, es que fue ‘kelly’, es decir, que durante un tiempo de su vida trabajó de limpiadora.
Los nuevos nominados resultaron de nuevo Cristina Porta, junto con Adara Molinero y Miguel Frigenti. El último sorprendió a todos al decir que quiere ser el próximo expulsado, pues no se ve capaz de seguir en el concurso sin Adara. Hay que destacar que Frigenti y Adara fueron nominados tras descubrir, por sorpresa, que Sandra Pica le dio tres puntos a Molinero y dos puntos al periodista, pues en teoría habían acordado sus nominaciones para salvarse.