La séptima entrega de Maestros de la costura comenzó con un guiño a la temporada anterior. Y es que seis antiguos participantes (La Brava, Begoña, Fran, Borja, David y Margarita) volvieron al taller para ayudar a los actuales aprendices. ¿El reto? Confeccionar a medida una prenda de caballero, de corte clásico, que pueda durar años en un armario.
En esa prueba el mejor valorado fue Ancor, que contó con la frescura de La Brava para coser una chaqueta de terciopelo. En el otro lado de la balanza estaba Gabriel, que tuvo la ayuda de Fran, y que empezó el trabajo con mal pie al elegir una tela que era de “cojines de piscina”, según el jurado.
Más tarde, los aprendices se trasladaron a la aldea del Rocío, en Huelva, para llevar a cabo un reto relacionado con la moda flamenca. Un equipo estaba formado por Ancor, Mily y Laura, y el otro, por Gabriel, Lluís y Yelimar.
La presión era muy fuerte, pues la final está cada vez más cerca, y Ancor manifestó que se encontraba mal. Al final de la prueba se agarró un momento a su compañera Mily y le dijo “Me voy a caer, ¿eh?”, para sentarse en una silla cercana a continuación.
A la hora de que Lorenzo Caprile, Palomo Spain y María Escoté diesen los veredictos Ancor tuvo que ausentarse, al encontrarse indispuesto por la presión. “Me ha dado un patatús”, explicó. La presentadora Raquel Sánchez Silva hizo entonces una interrupción para que los médicos le atendiesen.
Finalmente, Ancor, Laura y Mily fueron los mejor valorados de la noche, lo que provocó que Gabriel, Lluis y Yelimar se enfrentaron a un reto de eliminación sobre los bolsos. Los jueces hablaron sobre quién debía irse a casa, pero preguntaron a los tres participantes con el mandil blanco que quién debía irse a casa. Ancor, Laura y Mily coincidieron en dar el nombre de Lluís, al que afearon su actitud derrotista y su falta de ilusión.
Entonces Lorenzo Caprile anunció el veredicto. “El aprendiz que no continúa en el taller es ninguno. En esta prueba se nos ha hecho realmente imposible decidir qué bolso merecía la expulsión, os queríamos tener una semana más”.
Con esto, el programa da un nuevo giro de guion más a sus reglas. Hay que recordar que eso ya ha pasado en otras temporadas. En la segunda edición ocurrió lo mismo en la gala 6, donde los jueces decidieron que tanto Amparito como Isabel, que estaban en la cuerda floja, permaneciesen en el concurso. En la siguiente gala, sin embargo, el programa comenzó con una prueba de expulsión en la que abandonó la competición Alejandro, y en la prueba final fue Saray la eliminada.
Desconocemos si en la próxima entrega Maestros de la Costura eliminará a dos concursantes. Sería entonces la segunda vez que esto ocurriese en la edición, pues ya en el cuarto programa se hizo un cambio de normas que provocó la salida de dos grandes favoritos, Nani y Ancor (el cual luego consiguió ganar la repesca).