Los intentos de poner fin a las ruinas y el abandono que envuelven al Parque del Agua del la Expo 2008 continuan. Mientras se resuerve el lío judicial de las playas de Zaragoza, el Ayuntamiento vuelve a iniciar un nuevo expediente administrativo a la empresa que gestiona el centro deportivo Soccer World.
Este procedimiento, que busca poner fin a la concesión de la empresa actual, ya se inició en 2022. Aunque acabó sin llegar a puerto tras caducar al pasar más de seis meses sin resolución.
Ahora, el Gobierno de Zaragoza vuelve a intentar resolver el contrato con la empresa Fútbol es Nuestra Vida S.L. por el incumplimiento de sus obligaciones económicas. La entidad no ha pagado importantes cantidades, como el canon, basuras o el Impuesto sobre Bienes Inmuebles, y ha acumulado una deuda superior a 1,3 millones de euros desde 2011.
Ante esta situación, se ha acordado iniciar un nuevo proceso legal para extinguir la concesión, conforme a la normativa vigente. Ahora se abre un periodo de alegaciones para la empresa, con un plazo de entre 6 y 8 meses.
Las playas
En el caso de las playas de Zaragoza, el problema se remonta a la primera empresa que contaba con la concesión original. Esta decidió ceder el contrato a otra compañía y, según fuentes municipales, el Consistorio puso una condición para que se diera el traspaso: la nueva empresa debía hacer una serie de inversiones, valoradas en 500.000 euros, que la anterior concesionaria no había cumplido.
Estas inversiones eran imprescindibles para frenar el deterioro de las infraestructuras y garantizar la seguridad y calidad del espacio. Sin embargo, cuando el Grupo Parque de Atracciones asumió la concesión, mostró reticencia a cumplir con esta obligación. Ante la negativa, el Ayuntamiento instó a la empresa a hacer frente a la condición y a realizar las inversiones necesarias para evitar que las instalaciones siguieran deteriorándose.
El conflicto se elevó a los tribunales, y en primera instancia, el Ayuntamiento logró un fallo favorable, ordenando a la empresa que cumpliera con las inversiones. No obstante, la compañía recurrió la decisión, lo que ha dejado el asunto en un "limbo", a la espera de una sentencia en segunda instancia.