Desde que el pasado 31 de enero, la Conselleria de Sanidad que dirige el socialista Miguel Mínguez trasladó a la dirección del hospital de Dénia -departamento gestionado de forma público-privada por Marina Salud- "las normas para la recuperación de la gestión directa del servicio público de la atención sanitaria integral" de la comarca en 2024, se ha desentendido de este departamento. Incluso cuando la dirección hace dos meses tuvo que informar a los alcaldes de la comarca de este desinterés por parte de la Generalitat.
Pasado ya el periodo vacacional de la Semana Santa, toca organizar el verano y los refuerzos de plantilla. Pero según la filial de Ribera Salud, Sanidad todavía no ha dado respuesta a treinta y dos solicitudes, del medio centenar que, en materia de Recursos Humanos que se le han remitido. Además, se ha producido una situación de inestabilidad laboral al recurrir la Generalitat el convenio colectivo de los trabajadores del departamento.
En la Marina Alta, la reversión de su hospital se ha convertido en un eje central de la campaña de las autonómicas y municipales. Pero con la mala imagen que han dejado estos mismos procesos en Alzira o Torrevieja durante los dos últimos mandatos del Botánico (PSOE-Compromís-UP).
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Desde Ribera Salud aseguran que hasta el momento, "la Conselleria tan sólo ha respondido de manera global para autorizar salidas de profesionales, como excedencias o reducciones de jornada; situaciones que las Normas de Intervención no podrían contravenir, por tratarse de derechos previstos por la normativa laboral".
Y que están sin resolver todas las solicitudes de contratación de nuevos profesionales para cubrir puestos vacantes, bajas por enfermedad o incluso la transformación de cinco contratos temporales en indefinidos.
El grupo sanitario recuerda también que "tras la última reforma laboral, la contratación de personal está limitada, tanto a temporalidad como a puesto de trabajo, lo que dificulta aún más que Marina Salud pueda cubrir los contratos y, en ocasiones y por razones ajenas a su voluntad, se vea obligada a prescindir de profesionales por no tener autorización de la Conselleria de Sanidad para hacerlos indefinidos".
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La Generalitat ha utilizado en las últimas reversiones al sistema público la figura del "laboral a extinguir", asumiendo la plantilla para progresivamente ir sacando plazas por oposición y extinguir los contratos subrogados que los trabajadores sanitarios mantenían con al empresa privada.
El director gerente del Departamento de Salud de Dénia, Javier Palau, explicó a los alcaldes de la Marina Alta, la situación de bloqueo que podría plantear el nuevo escenario de intervención ya que en las normas figura que cualquier contratación "deberá contar con el informe favorable de este órgano de contratación, a cuyo efecto se tendrá que presentar, con carácter previo, la comunicación de cambio debidamente motivada.
por eso, Marina Salud insiste en solicitar a la Conselleria de Sanidad que "responda con celeridad a las propuestas de solicitud de nuevas contrataciones, con el objetivo de que la prestación sanitaria a los vecinos de la Marina Alta no se vea afectada por este tipo de dilaciones burocráticas".
Asimismo, la concesionaria subraya su compromiso de preservar la calidad de la asistencia, en la misma línea que ha guiado siempre al Grupo Ribera en otros departamentos de salud, en los que también ha tenido responsabilidades de gestión: "antepondremos la cobertura de necesidades de nuestros pacientes al cumplimiento de normas alejadas de la realidad cotidiana", ha declarado el gerente del Departamento.