Del pop, indie o house: ¿cuáles fueron las discotecas míticas de la provincia de Alicante?
La década de los 90, incluso la precedente, coincidió con la eclosión de las salas más icónicas de la provincia y que hoy solo conservan el nombre o son recuerdos.
17 noviembre, 2022 06:20Los años 80 y 90 son sinónimo de una "libertad" en el ámbito musical y de ocio en la provincia de Alicante que varias generaciones recuerdan con añoranza. Los diferentes movimientos musicales aparejados a la apertura de "salas" o "discotecas" no tuvieron la repercusión nacional (salvo contados casos) como la "Movida madrileña" o la "Ruta valenciana, pero marcaron un antes y un después en el modo en el que la juventud vivía la noche. Y no sólo durante los fines de semana.
Alicante contaba con el precedente del Gallo Rojo en El Campello, definida por algunos como la "mejor sala de fiestas" de Europa en su época -abrió en 1962- y por la que pasó buena parte de la escena musical nacional e internacional de las décadas precedentes.
Según recoge la propia web municipal, pos sus tablas pasaron Lola Flores, Ray Charles, Louis Amnstrong, Adamo, Gilbert Bécaud, Joan Manuel Serrat, Carmen Sevilla, Nino Bravo, Rocío Jurado, Marisol, el Dúo Dinámico, Julio Iglesias o Norma Duval. Hasta que en 1984 se clausuró con un concierto de Camilo Sesto.
Había comenzado el imparable ascenso de las "discotecas" y la ciudad de Alicante ya contaba en ese tiempo con una sala "estrella": Bugatti. Era la primera de las 10 que los alicantinos han considerado míticas, tal vez por su desparición.
1 | Bugatti (Alicante)
En 1979, un conocido deportista de la ciudad de Alicante, Perramón -portero de balonmano del Calpisa y el FC Barcelona- abrió en los aledaños de la plaza de Correos un local que sería la referencia de la "marcha" en la ciudad durante más de una década. Abría todos los días y contaba con un público muy variado, desde fiestas de institutos a grupos de amigos que adoraban las "cantaditas" o parejas que disfrutaban de las "canciones lentas".
Más adelante, Bugatti volvería a abrirse en la primera década de los 2000 con el nombre de Z-Klub, y un público y una oferta musical renovada que ya nada tenía que ver con la de los 80 y los 90.
2 | Factory (Alicante)
Ya en los años 90, y al calor de las grades discotecas de la zona de entreplayas, entre la Albufereta y San Juan, abrió Factory en la zona conocida como "El Chinchorro", en la huerta de Alicante. Fue una de las primeras salas en las que "ver amanecer" ya que su horario se extendía durante horas y horas. Debido, en buena parte, a su lejanía de cualquier zona residencial.
Factory, a diferencia de Va Bene o Copyti que eran locales pensados para el público veraniego, baría todos los fines de semana del año y se asemejaba a otros fenómenos de todo el territorio nacional cercanos al concepto "after". Para después de salir por El Barrio o La Zona de Alicante.
3 | Di Roma o Potato (Alicante)
Cuando los controles de alcoholemia acabaron con el ocio en la playa de San Juan surgió la zona de El Puerto como alternativa. O tal vez, como plan premeditado. Como explica el empresario del ocio de Alicante, Lalo Díez, "el ocio de la noche es como la energía, no se destruye, se transforma".
A principios de la década de 2000 surgieron grandes pubs o salas como Di Roma, Potato o Capitán Haddock en el puerto con licencia de discoteca (por horario) que marcaron una época en la ciudad. Cerraban a las 7 AM cuando el sol ya lucía o estaba a punto de salir y congregaban un público de los más heterogéneos.
4 | Camelot (Santa Pola)
Durante la década de los 90 (abrió en 1989) y hasta el año 2014, la principal referencia de las "salas indie" de la provincia fue Camelot, en los aledaños de las salinas de Santa Pola. Durante 25 años fue el "templo del pop" no sólo para los alicantinos, sino también para los turistas madrileños que en Madrid tenían la Sala Maravillas y en Santa Pola su refugio veraniego.
Con los años la sala fue acogiendo conciertos de lo más granado del pop nacional y estableciendo sinergias con el Festival de Benicàssim, la referencia indiscutida del nuevo movimiento musical. Con amplias terrazas y un interior de "castillo", por sus instalaciones pasaron los mejores djs y grupos del momento.
5 | Ku, KM y Penélope (Benidorm)
La época dorada de las discotecas contó en Benidorm con un capítulo especial. Incluso con una "carretera" apodada con ese nombre que sacaba las salas del entorno urbano. El "dance" era su marca de distinción y algunas eran ya "afters" en toda regla.
Por Ku, KM, Pachá o Penélope pasaron los mejores djs internacionales de la época. Abrían todos los fines de semana del año y sin interrupción en época estival. Los edificios eran imponentes. Ku contaba incluso con un remedo de platillo volante que la coronaba.
6 | KKO y Hook (Torrevieja)
Si el norte de la provincia tenía sus propias salas, el sur contaba con Torrevieja como su principal atractivo de costa y grandes salas como KKO o Hook. KKO abrió en 1992 como referencia de la música pop internacional y "remember" y luego la electrónica para toda la provincia y casi llegó a cumplir 20 años cuando en 2011 sus dueños decidieron trasladarla a Los Alcázares, en Murcia. Fue el final de un icono en el ocio nocturno de Alicante que no tenía nada que envidiar a las discotecas valencianas.
Hook abrió dos años más tarde, en 1994, y se vanagloriaba de ser un sitio en el que poder ver como amanecía. La discoteca del garfio se caracterizaba por sesiones muy potentes, preludio de lo que se podía hacer luego en las salas del interior de la Vega Baja.
7 | Metro (Bigastro)
Nadie podía imaginar que un pequeño municipio del interior como Bigastro albergase en su extrarradio una de las discotecas más míticas de la provincia: (la) "Metro". Nació en 1992 y fue una absoluta referencia para toda una generación que todavía atesora sesiones en sus redes sociales.
Hoy no está desaparecida del todo ya que hace fiestas puntuales con djs de gran calidad, bajo el nombre "Metro Dance Club". Un concepto renovado que ha evolucionado desde los 90 y los 2000.
8 | Central (Almoradí)
No muy lejos de Bigastro, en Almoradí, la sala de referencia era Central Rock Club. En sus comienzos, 1989, tenía tintes góticos, pero tras el primer año de vida el nombre nada tenía que ver con la música "makina" que empezaba a reinar en la discoteca.
En junio de 2009 vivió su peor momento saltando a todos de los medios de comunicación nacionales por el tiroteo que se produjo en las puertas del local. Ahora ha renacido con el nombre "Central Rebirth" y alejado del concepto de música electrónica radical de sus comienzos.
9 | Albades (Muro de Alcoy)
En ese ambiente "makinero" nació también Albades, en Muro de Alcoy, una sala que ya cuenta con 30 años de historia y que se ha renovado y evolucionado con el cambio de las tendencias musicales. Por sus pistas ha pasado lo más granado de la provincia.
10 | Publik (Biar)
También en los 90 destacó Publik, en Biar, como una de las escapadas más alejadas de la "Ruta" valenciana. La música electrónica era el principal atractivo de una sala con la que acabó su lejanía de los principales núcleos de población de la provincia.