Piratearon la base de datos de una clínica de fertilidad y se hicieron pasar por ella para gestionar sus cobros. Así resume la Guardia Civil las acusaciones a un grupo criminal de cinco personas que operaba desde Alicante para cuya detención ha necesitado de la colaboración internacional.

Este es el final de un largo proceso que se inició en agosto de 2021 con la denuncia del gerente de una clínica de reproducción asistida de la provincia de Alicante. El Área de Investigación del Puesto Principal de San Juan abrió la operación Herkul para descubrir cómo se había estafado más de 30.000 euros a tres pacientes extranjeras mediante la suplantación de sus datos.

La banda detenida, según explica el comunicado de la Guardia Civil, utilizaba el método delictivo conocido como man in the middle. Es decir, atacaron la cuenta de correo electrónico de la clínica afectada para así, de forma ilícita, acceder a su sistema informático. Una vez dentro del sistema, obtenían los datos de los pacientes y por medio del correo electrónico de la misma clínica, la suplantaban.

Al contar con ese control, la banda se dedicó a enviar los correos a sus clientas incluyendo un nuevo número de cuenta. Las víctimas que caían en la trampa realizaban los ingresos bancarios en las cuentas bancarias de los delincuentes en lugar de a la clínica que habían contratado.

Antes de que las víctimas se diesen cuenta del engaño, la banda enviaba las cantidades económicas obtenidas de forma ilícita a otras cuentas de Holanda. En este punto, los investigadores solicitaron la colaboración de la Policía de Ámsterdam para ver cómo ocultaban el origen ilegal de este dinero a través de una empresa.

La estrategia del desvío del dinero, según relata la Guardia Civil, incluía el uso de cuatro mulas económicas. Entre los investigados en Andalucía estaban dos varones de 43 años y de nacionalidad maliense, quienes fueron investigados en Roquetas de Mar, y una mujer de 39 años y de nacionalidad marfileña en Málaga.

Si en febrero ya tenían localizado este dispositivo, en junio abrieron una segunda fase de la investigación que dio con el líder de este grupo criminal. El también detenido que residía en Roquetas es un varón de 41 años de nacionalidad rumana, con elevados conocimientos informáticos. El 8 de junio se procedió a su detención y a la de una cuarta mula económica, un varón de 41 años de edad y de nacionalidad nigeriana.

Los dos detenidos han sido puestos a disposición del Juzgado de Guardia e Instrucción de Roquetas de Mar, el cual ha decretado la puesta en libertad de ambos bajo medidas cautelares. El Juzgado de Instrucción de Alicante, el órgano competente que entenderá de las diligencias instruidas, será el que, una vez que reciba todas las actuaciones, determine el grado de participación atribuible a cada uno de los supuestos autores.

A los detenidos e investigados se les han atribuido los delitos de pertenencia a organización criminal, descubrimiento y revelación de secretos, estafa continuada, blanqueo de capitales y usurpación de identidad.

La operación Herkul, como concluye el comunicado de la Guardia Civil, ha localizado de momento a tres víctimas de esta banda, de nacionalidad alemana, irlandesa y holandesa. Como destacan, no da por finalizada la investigación, por lo que no se descarta que se amplíe el número de mujeres estafadas.