"Estoy rota": la madre de la niña asesinada por ETA en Santa Pola, tras saber que su asesino saldrá de permiso
Toñi Santiago asegura que ha sentido "como si hubiera retrocedido 20 años en el tiempo" al enterarse de que a Otegi le han dado 4 días de permiso.
9 julio, 2022 02:49"No es rabia lo que siento, es más bien una tristeza inmensa", asegura Toñi Santiago, la madre de Silvia, la última niña asesinada por ETA hará 20 años el próximo 4 de agosto en un atentado en la casa cuartel de Santa Pola, al saber que uno de los terroristas que accionó aquel botón saldrá de permiso, como ha adelantado El Confidencial.
"Estoy completamente rota", añade Santiago, hasta el punto de no poder ir a trabajar del disgusto desde que se enterara de la noticia hace una semana. "Quiero que todo el mundo sea capaz de entender el dolor de una madre. Ahora mismo mi sentimiento es como si hubiera retrocedido 20 años en el tiempo. Como si hubiesen vuelto a activar aquel coche bomba y hubieran asesinado otra vez a mi hija", dice con la voz ligeramente partida.
Aquel 4 de agosto de 2002 estalló, a las 20.15 horas, un coche bomba estacionado junta a la valla del acuertalamiento en una hora en la que los agentes y sus familias estaban en sus viviendas, como era el caso de Silvia, de 6 años. Al lado del vehículo estaba esperando el autobús Cecilio Gallego, de 57 años, también asesinado por el comando Argala formado por los etarras Óscar Zelarain y Andoni Otegi, ambos condenados a 843 años de cárcel por este atentado.
Ahora este último podrá salir 4 días de permiso tras permitirlo la Junta de Tratamiento de la prisión de Logroño -con el visto bueno de Fiscalía- donde está condenado hasta 2038 por haber participado en los conocidos como encuentros restaurativos con alguna de sus víctimas, una iniciativa al calor de la 'vía Nanclares' propiciada por el Ministerio del Interior.
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Pero para Toni Santiago, a quien finalmente le han dejado personarse como acusación particular en la causa abierta por la Audiencia Nacional para identificar a los autores intelectuales del atentado, la justicia restaurativa no es justicia. "Ojalá me equivoque, pero creo que es un preámbulo a su salida definitiva", denuncia. "Esto no viene de ahora, esto es una hoja de ruta que llevan muchos años llevando a cabo", agrega, tras citar al PSOE de Zapatero y "la aceptación" del de Rajoy. "Todos los partidos políticos que están ahora mismo en el Congreso de los Diputados son cómplices de lo que hoy está pasando, por acción o por omisión", asegura.
Durante la conversación, no para de preguntarse por qué ella ha quedado "al margen" de esas conversaciones entre el etarra y sus víctimas. Otegi también participó en el asesinato en 2001 del concejal de UPN José Javier Múgica. Cuando prestó declaración su viuda en el juicio, visiblemente afectada al relatar cómo su marido ardió en llamas dentro del coche le habían colocado un artefacto explosivo, Andoni Otegi era uno de los acusados que se estaba riendo.
Capaces de asesinar a niños y partirse de risa en el juicio, que se rían en el Congreso solo es parte del circo
— Elih Pi 💚🇪🇸 (@ElihPi) July 23, 2019
Andoni Otegi y Oscar Celarain, asesinos de la niña Silvia Martínez de 6 años, que murió en el atentado contra la casa cuartel de la Guardia Civil de Santa Pola en 2002 pic.twitter.com/rmmK8sJoWj
"¿Por qué Marlaska tiene la poca decencia de ponerse en contacto conmigo para concederme una medalla por ser víctima del terrorismo y no me hace saber que este asesino estaba hablando con las familias?", se pregunta esta madre de un hijo de 17 años. Como explica, el ministro socialista le llamó hace cuatro meses para ofrecerle una condecoración que ella rechazó.
"No sé con qué victimas se ha reunido y me da igual, pero en el momento en el que me llaman desde el Ministerio del Interior para ofrecer una condecoración, como madre tengo el derecho de que se me explique y se me convoque a una reunión con el asesino de mi hija, pero claro, evidentemente, me han dejado al margen porque lo que le voy a decir a ese terrorista no es de su agrado", aclara.
Considera también que alguien del Gobierno debería de haberle comunicado que uno de los asesinos de su hija estaba acogiéndose a estos talleres restaurativos, "en lugar de enterarme por la prensa".
Homenaje sin políticos
"Como nadie ha tenido a bien hacerme partícipe de estas reuniones, yo hago un llamamiento formal al asesino de mi hija para que venga a Santa Pola", responde Toñi Santiago tras recordar que "todos los 4 de agosto hacemos un homenaje a mi niña y a Cecilio, y por ende a víctimas del terrorismo" en la rotonda que queda enfrente del cuartel de la Guardia Civil. "Que venga y que me diga cómo piensa restaurar la vida de esa niña", sostiene.
"Este 4 de agosto voy a llenar la plaza de gente, no sé como lo voy a hacer, pero lo haré", avanza. "Yo no soy política como Mari Mar Blanco y no me debo a ningún partido", añade en alusión a la polémica por su no participación, después rectificada, en un homenaje de Ermua a su hermano Miguel Ángel.
"Así que ese día la única que voy a hablar soy yo, quien venga con siglas políticas o a hacerse una foto a costa del nombre de mi hija que se quede en su casa porque yo misma le invitaré a que se vaya", afirma. "Pablo Casado vino dos años para hacerse la foto y le dije que no", concluye.