Unos padres han sido detenidos por agredir el pasado 4 de septiembre a la médica que anestesió a su hijo menor para una operación en el Hospital Comarcal de la Vega Baja con un puñetazo que le causó lesiones graves. La pareja, formada por un hombre de 24 años y una mujer de 26 españoles, atacó a la facultativa tras ver que su hijo se despertó alterado de la anestesia suministrada para la intervención, señalan fuentes del Sindicato de Enfermería de la provincia de Alicante (Satse).
La Guardia Civil de Alicante arrestó a los implicados por el incidente ocurrido en el centro ubicado en la pedanía de San Bartolomé. Los detenidos han sido acusados de un delito de atentado contra funcionario público.
Tras recibir la denuncia el día 5 de septiembre, la Guardia Civil de Jacarilla inició una investigación para esclarecer los hechos. El día 6 de septiembre, tras identificar y localizar a los sospechosos, los agentes procedieron a la detención de ambos. La mujer, madre del menor, fue citada y puesta en libertad debido a que se encontraba a cargo del niño. Por su parte, el hombre fue puesto a disposición judicial el día 7 de septiembre, ante el Juzgado de Instrucción número 2 de Orihuela, que decretó su libertad tras la comparecencia, han señalado desde el instituto armado.
La Junta de Personal del Departamento de Orihuela, ante "el lamentable suceso" de la agresión sufrida por una médica anestesista en el ejercicio de sus funciones, expresó "su más enérgica condena y repulsa".
"Este acto de violencia, lejos de ser un hecho aislado, revela una preocupante escalada de agresiones hacia los profesionales sanitarios en nuestro entorno laboral. La seguridad y el bienestar de nuestros compañeros y compañeras son una prioridad absoluta, y no permitiremos que actos como este queden impunes", han denunciado en un comunicado.
Por estos hechos, Satse ha exigido que se condene públicamente este acto de violencia y se transmita un mensaje claro de tolerancia cero ante cualquier tipo de agresión en el ámbito sanitario. " Y que se refuercen las medidas de seguridad en nuestros centros de trabajo para garantizar la integridad física y psicológica de todos los profesionales".
También han pedido "que se establezcan protocolos claros y eficaces para la atención a las víctimas de agresiones y para la prevención de futuros incidentes. Y que la Administración sanitaria y las autoridades competentes brinden todo el apoyo necesario a la víctima y a la plantilla en general", entre otros puntos. Y han resaltado que no permitirán "que la violencia se convierta en una amenaza constante para nuestra labor".
Por su parte, la Guardia Civil viene desarrollando el Plan integral para la seguridad de los profesionales de la salud con la finalidad de incrementar la seguridad de los centros médicos y de su personal, contando con los Interlocutores Policiales Sanitarios, quienes asesoran a la Administración Sanitaria y a los representantes de los profesionales de la salud en la "implantación de medidas preventivas especializadas"