El futuro del sector inmobiliario está más unido que nunca a la sostenibilidad ambiental y al respeto al medioambiente. Hablamos de uno de los sectores que más recursos moviliza y de los que más residuos genera y, por tanto, del sector que más debe aplicarse en su compromiso sostenible. En números, la construcción es la responsable del 40% del consumo energético, del 36% de las emisiones de CO2 y del 35% de los residuos en la Unión Europea (UE). Esto tiene que cambiar. De hecho, ya está cambiando.

La inmensa mayoría de las compañías inmobiliarias españolas ya está actuando al respecto e implementando medidas alienadas con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). Buen ejemplo de este compromiso es AEDAS Homes a través de un ambicioso Plan Estratégico ESG. La organización ha firmado recientemente una Política de Acción Contra el Cambio Climático.

AEDAS Homes ya desarrolla el 100% de las promociones conforme al Libro Verde de la empresa (incluye un sello propio de sostenibilidad, Ecoliving) u otros certificados de reconocido prestigio como el sello internacional BREEAM. Esto es, la promotora incorpora en sus residenciales, por ejemplo, puntos limpios a sus proyectos residenciales (de pilas, ropa usada, aceites, etc.), sistemas de reciclaje de aguas pluviales y grises, medidas de ahorro en el consumo de agua en instalaciones y aparatos sanitarios o el uso de áridos reciclados en sus construcciones.

Sobre el terreno, en Sant Joan d´Alacant se está desarrollando la primera promoción de la Comunidad Valenciana en estructura de madera en un edificio en altura: Fioresta, un proyecto formado por dos edificios de cuatro alturas de 51 viviendas reconocido incluso a nivel internacional en los Iberian Investment Property Awards como ‘La Mejor Iniciativa Verde del Año’ en la Península Ibérica, lo que simboliza el compromiso de la organización con la sostenibilidad. Todo un icono de la máxima sostenibilidad inmobiliaria.

Fioresta se alza como modelo de la economía circular y demuestra hasta qué punto es posible la sostenibilidad en la construcción residencial en tres pilare: 1) mínimo gasto de energía, 2) baja huella de carbono y 3) reciclable. En Fioresta se usará aproximadamente un total de 1.150 toneladas de madera, producida 100% en País Vasco, un material con el que se ha conseguido reducir en torno a un 75% las emisiones de CO2 en la fabricación del edificio respecto a una construcción tradicional. Con la estructura de madera reducimos en un 72% la huella de carbono si al final de su vida útil, se recicla.

Además de la incorporación de la madera, el material más sostenible que existe -no sólo no emite CO2 sino que lo absorbe cuando forma parte del árbol en el bosque-, Fioresta se está construyendo con el sistema más sostenible: la industrialización, basada en los llamados Métodos Modernos de Construcción (MMC) 2D y 3D. Esta innovadora edificación ha reducido el tiempo de ejecución del proyecto en torno a un 30% -unos cuatro meses- y tiene como grandes exponentes en Fioresta los baños modulares offsite y los paneles industrializados de madera de toda la estructura ensamblada como piezas de lego. Exponentes a los que hay que sumar unos óptimos aislamientos de lana de roca reciclada.

Queda claro que el sector inmobiliario está avanzando con paso firme para ser una actividad sostenible y respetuosa con el medioambiente. AEDAS Homes tiene un compromiso muy firme y claro: trabaja para reducir en un 50% la huella de carbono de sus proyectos en 2030. Un compromiso ambiental, pero sobre todo un compromiso con la sociedad. El futuro del planeta pasa por cuidar el planeta también desde el sector inmobiliario: pasa por hacer viviendas sostenibles desde su construcción, durante su uso y al final de su vida útil a través del reciclaje. El sector está concienciado y tiene las palancas para lograrlo. Entre todos, conseguiremos crear un sector que cuide el planeta.

Juan López es director territorial de AEDAS Homes en Levante y Baleares