Aunque las comisiones aún no dispongan de sus correspondientes permisos, nos encontramos a muy pocos días de ver en las calles los primeros fragmentos del arte efímero que definirá el retorno de les Fogueres, después de prácticamente tres años ausente de Alicante. Bienvenido sea.
De entrada, y haciendo una mirada en torno a la distribución por categorías para estas ya inminentes fiestas, me gustaría destacar un detalle que pueda parecer irrelevante. Por vez primera hace varios años, la subdividida sexta categoría de Fogueres desciende de la cifra de 30 participantes -en total son 28- 14 en cada una de sus dos variantes.
Sin tratarse de algo que permita lanzar las campanas al vuelo, al menos permite comprobar como algunas comisiones en este intervalo han encontrado recursos y decisión para ascender de categoría.
En todo caso, las principales categorías copan autores foráneos. Es decir, seis de las nueve hogueras especiales proceden de artesanos de fuera de la provincia. También seis de las ocho que participan en primera, y cuatro de las siete que lo hacen en segunda.
Ese predominio de artistas foráneos se mantiene hasta cuarta. En quinta se iguala a siete en ambas vertientes, y será solo en sexta donde veinte de las 28 obras en concurso emerjan de profesionales locales. Queda claro que la equivalencia viene a señalar una mayor proporción de agremiados de Valencia y Burriana en las secciones más altas, y una clara oposición en el sentido contrario.
Al hablar de las infantiles, hay un predominio de artistas alicantinos, ya que 49 de las 90 surgen de nuestros talleres. Sin embargo, de nuevo surge el predominio de profesionales de las otras dos provincias valencianas en las categorías superiores.
Ocho de las once especiales, siete de las ocho de primera, marcan una preferencia, que ya en secciones inmediatamente sucesivas se encuentran más equilibradas, hasta que de nuevo en la doble sexta de infantiles, 17 de las 18 participantes se encuentran aun esperando su planta en talleres de nuestra provincia.
En este 2022 seguiremos con nueve participantes en categoría especial adulta. Quizá sea el último año con esa presencia, ya que parece insalvable un descenso de hasta tres comisiones en dicha élite, cara a 2023. En cualquier caso, las espadas se encuentran en alto, sobre todo a partir de las modificaciones efectuadas en el modelo de votación de los jurados respectivos, y teniendo en cuenta que las dos apuestas de coste más elevado son las de Sèneca-Autobusos y Sagrada Familia.
Por su parte, la presencia en la categoría más elevada de las infantiles asciende hasta once obras, en donde se adivina una dura pugna en al menos cinco de ellas, caracterizadas en los últimos años por asumir en sus realizaciones los premios más elevados de dicha élite.
Estas son algunas curiosidades, de esos fragmentos que en poco más de cien horas veremos y disfrutaremos en las calles de Alicante. Señal de que, ahora sí, la Fiesta ha regresado ¡Ya tocaba!