Si bien España es uno de los países más tolerantes del mundo, la homofobia, lejos de desaparecer, sigue muy presenta en la sociedad... y en sus calles. No hay día en el que personas afectadas denuncien nuevos ataques en las redes sociales, convertidas en altavoces de esta lacra desde un tiempo a esta parte.
El último caso ha tenido lugar en el barrio Santa Cruz de Alicante el cual, por su belleza, se presta a numerosas fotos para subir a las redes sociales. En una de sus calles, dos turistas jóvenes que estaban haciéndose un vídeo para TikTok, se han visto obligadas a marcharse después de que una mujer desde un balcón les increpara su actitud.
"Pero ¿qué hacéis ahí?", les preguntaba con tono serio ante la sorpresa de esta pareja. Tras explicarle que estaban haciendo un vídeo para sacar fotos, la vecina seguía: "¿para qué? Para subirlo magreándoos delante de todo el mundo, venga tira ya de aquí", añadía.
Las dos chicas, sin casi tiempo a reaccionar, optan por la retirada, cogen el móvil que no deja de grabar mientras la vecina les repite que se vayan de esa calle, la cual les espeta "y se lo mandas [el vídeo] a tu madre, bonita". "Pues sí", le responde una de ella, "y más educación que tú, tiene, maleducada".
Reacciones
Tras este incidente, una de las afectadas ha hecho un nuevo vídeo para explicar "desde su perspectiva" cómo se sintieron. Para empezar, ha dicho que si bien les han llegado muchos mensajes "muy bonitos" de apoyo, otros les han cuestionado que hayan sufrido un ataque homófobo.
[Revelan insultos homófobos en un aseo de un bar de Alcoy pero no denuncian por miedo a represalias]
A continuación, revela que la mujer que les increpó les había visto al principio, mientras tendía, cómo se hacían fotos de manera individual "y en ningún momento nos dijo nada". Sobre el momento en el que se grabaron, lo ha definido como "un vídeo normal, posando, tampoco es que nos estuviésemos magreando, como dice la señora, ni nada de tocamientos raros, nada", defendía.
"Lo que estábamos era buscando poses y subiendo escalones y bajando escalones", como, de hecho, habían hecho de manera similar en otra calle, explica. "El caso es que la señora nos empieza a decir que nos estábamos magreando y ahí empieza la homofobia porque, a una pareja heterosexual que se hace un vídeo dándose un pico o sonriéndose, ¿les dirías que se están magreando?", se pregunta.
"Entiendo que a ese callejón no vayan muchos chavales a darse el lote porque no lo estábamos haciendo", agrega, "¿tú a una pareja heterosexual le dices enséñaselo a tu madre, como si estuviéramos haciendo algo malo?", reflexiona.
La mujer, recuerda, también le preguntó que a dónde iban a subir el vídeo y la joven responde: "como si lo fuéramos a subir a una cuenta de Only Fans o porno, cuando en el vídeo no había nada sexualizado por salir dándonos un pico y nos hubiéramos puesto a hacer el tonto si nos dejan dos segundos más".
Al final, concluye que la actitud de la vecina se ha debido "por el simple hecho de ser dos tías", porque darse un beso "es una actitud normal que hace cualquier pareja cuando se va de vacaciones juntas y si hubiera alguien por ahí para hacernos fotos, nos la hubieran hecho", afirma.
A continuación, en su explicación se defiende por no haberse quedado en esa calle "que es pública" porque "tenía miedo de que nos echara algo desde el balcón". "Yo solo quería irme de ir cuanto antes porque se va a encabronar por las malas maneras que tenía", confiesa.