La Comunidad Valenciana recibió en 2022 un total de 8,6 millones de turistas internacionales, lo que supone un 10,4 % menos que en el último año antes de la pandemia, 2019 (9,6 millones). Sin embargo, su gasto asociado fue de 10.101 millones de euros, un 5 % por encima de ese mismo ejercicio (9.620 millones, 481 menos).
La cifra es mucho más positiva si se compara con 2021, un periodo con abundantes restricciones: las visitas subieron un 114,1 % (el año anterior fueron 4 millones), con un 131 % más de gasto.
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El comportamiento es también bueno si se compara con el conjunto de España. En total el país recibió un total de 71,6 millones de turistas internacionales, un 14,3 % menos que en 2019, antes de la pandemia, si bien el gasto asociado a esas llegadas sumó 87.061 millones, ya solo un 5,3 % por debajo de entonces.
La mejor evolución del gasto se debe a la subida del desembolso medio diario, que aumentó un 17,8 % sobre 2021, hasta los 162 euros y se sitúa 7 euros por encima de la cifra de 2019. Por su parte, en la Comunidad Valenciana el gasto medio diario ascendió a 118 euros, un 21,3 % más que en 2021.
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Según las encuestas de entradas de turistas (Frontur) y del gasto asociado (Egatur) publicadas este jueves por el Instituto Nacional de Estadística (INE), Reino Unido fue el primer emisor de turistas, con 15,1 millones, seguido de Francia (10,1 millones) y Alemania (9,76 millones).
Quinto destino en España
En todo 2022 la Comunidad fue el quinto destino de visitantes internacionales por autonomías, con un 12 %, por detrás de Cataluña, Baleares, Canarias y Andalucía.
Solo en el mes de diciembre, el número de turistas que llegaron a la Comunidad Valenciana fue 514.415, un 34,9 % más que el mismo mes del año anterior, y el principal país emisor fue Francia con un 23,7 %, seguido de Reino Unido con el 23,3 % de los visitantes. El número de pernoctaciones se situó en 6 millones, un 39,5 % más.
Esos turistas gastaron en diciembre 594 millones de euros, un 47,7 % más, con un gasto medio de 98 euros, un 5,9 % superior.
Para esta campaña los empresarios turísticos esperan un buen año pero siguen enfrentándose a la incertidumbre de la coyuntura internacional: la crisis inflacionaria de destinos prioritarios, como Reino Unido, desvía clientes a países del Mediterráneo Oriental (Turquía) y del Norte de Áferica (Egipto), lo que puede forzar una guerra de precios.