Alicante

Estados Unidos es una de los principales emisores de turistas del mundo. Las conexiones con el país norteamericano han sido siempre codiciadas en España, principalmente por el alto poder adquisitivo de los estadounidenses y la fortaleza que está mostrando en un escenario internacional complicado. 

La posibilidad de habilitar un vuelo entre el aeropuerto de Alicante y Nueva York ha sido calificado como "joya de la corona" por el presidente de la Diputación de Alicante, Carlos Mazón. Y no es para menos. Málaga anunció el pasado verano una conexión directa con el país, un lujo normalmente reservado a Madrid y Barcelona. Ni siquiera Valencia, uno de sus principales destinos en España, la tiene.

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En una entrevista con Efe, Mazón citó dos factores importantes a la hora de captar este mercado: el turismo lingüístico, algo en lo que se están especializando las universidades alicantinas, y la condición de Alicante como puerto de embarque de cruceros de MSC por el Mediterráneo. 

Esta segunda característica podría ser vital a la hora de asegurar un vuelo directo desde el aeropuerto de El Altet. Son muchos los norteamericanos que deciden visitar distintos países del Mediterráneo en un crucero, y la posibilidad de tener un enlace que les permita llegar a una ciudad listos para embarcar es una de las principales vías de negociación del Patronato de Turismo de la Costa Blanca. 

La actual coyuntura, además, es de reactivación del mercado norteamericano. Aunque la situación económica y energética parece anticipar un año complicado para los europeos, los estadounidenses cuentan con la fortaleza del dólar como principal baza en sus viajes, lo que les ha hecho ganar poder adquisitivo de manera casi automática. Hoy por hoy, pagar en dólares abarata entre un 10 y un 15 % los paquetes contratados en Europa.

Según el estudio 'El impacto del turista estadounidense en España', elaborado por Mabrian, el perfil del turista estadounidense que ha visitado España en 2022 es mayor de 35 años, con un sueldo por encima de los 75.000 dólares (69.387 euros) y cuyos viajes duran entre dos y siete días, dependiendo de si visita un destino urbano o las islas. 

Un mercado muy concentrado

Lo más interesante de este informe, sin embargo, es que el origen y el perfil de los clientes: la mitad de los americanos que visitaron España el pasado verano proceden de 10 ciudades, principalmente de Nueva York (14%), Miami (9%) y Los Ángeles (6%), seguidas de San Francisco, Washington, Chicago, Boston, Filadelfia, Orlando y Dallas. En estas ciudades, además, la demanda se concentra en unos 3 o 4 barrios concretos. 

Sus intereses suelen estar centrados en la gastronomía, las compras y un lujo activo, como actividades al aire libre y ejercicio físico. Asimismo, la cultura y los espacios verdes también forman parte de los mayores intereses de los americanos cuando visitan España. Los estadounidenses analizados se han alojado mayoritariamente en establecimientos y hoteles de 4 y 5 estrellas.

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Por último, si se analizan los datos de comentarios y menciones positivas y negativas que dejan los clientes de este mercado, los aspectos que más aportan valor a los estadounidenses en España son la sensación de seguridad y el clima, así como su satisfacción con la planta hotelera, de la que destacan la localización y la limpieza.

Los factores que restan valor a su experiencia, y que tienen margen de mejora en nuestro país son los servicios relacionados con la satisfacción del producto, como por ejemplo como el arte y la cultura, la naturaleza, actividades familiares, compras y bienestar, principalmente.