El Salón de Plenos del Ayuntamiento de Calpe vivió ayer un encuentro tenso marcado por las posturas enfrentadas y distantes entre críticos y promotores de la ampliación de una macrogranja marina en el litoral calpense.
Sentados en la bancada de la derecha, lugar que ocupa la oposición de la corporación, estuvieron los responsables de Avramar, la empresa que está acometiendo la ampliación con el rechazo de buena parte de la sociedad política y civil y empresarial, también presente. A la reunión, solicitada por la mercantil, también participaron miembros de la Asociación Empresarial de Acuicultura Española (Apromar) para tratar de reforzar su línea argumental.
Porque de eso se trataba, de tratar de revertir la corriente de opinión que se ha instalado en este municipio costero donde se han sucedido los manifestaciones de repulsa, los discursos críticos y, a juicio de la mercantil también, "la difusión de informaciones erróneas sobre la instalación".
De ahí que Avramar, según explica el Ayuntamiento de Calpe en un comunicado donde recoge su amplia versión de la polémica, ha mantenido reuniones previas con diferentes colectivos para trasladarles su malestar por dicha información que consideran equivocada.
"Como la cantidad de pienso medicado, que en la acuicultura española está por debajo del 1% frente al 20% publicado; el hecho de que la actividad afecte a la pesca", como se ha dicho, "circunstancia que ha sido aclarada con la Cofradía de Pescadores, o su supuesto impacto medioambiental, que es vigilado de manera estricta por un organismo externo a la empresa", resume
De hecho, la empresa recuerda que gestiona otras instalaciones en la Comunidad Valenciana, como en Burriana o Villajoyosa, ambos en Castellón. "Las dos localidades cuentan con banderas azules y la acuicultura convive con el turismo desde hace más de 20 años. Como también lo hace en otros países de referencia para el turismo internacional como Grecia, Italia, Noruega o Croacia", asegura la compañía.
Otros de los desmentidos por Avramar ha sido que la instalación de Calpe va a contar con un máximo de 30 viveros "y no los 45 que se están indicando". "De ninguna manera la instalación va a dañar la calidad del agua, algo que sería perjudicial para los propios peces", han dicho. "El proyecto cuenta con un Plan de Vigilancia Medioambiental, determinado por la administración, en el que un organismo, externo a la empresa, medirá mensualmente diferentes parámetros para garantizar la calidad del agua y de los fondos marinos, reportando a las autoridades autonómicas. Además, la empresa analizará la calidad de las aguas de baño".
Respecto al impacto paisajístico denunciado por el Ayuntamiento y entidades ecologistas, "el principal inconveniente señalado por los diferentes participantes en la reunión de trabajó de la mano de la máxima autoridad en la materia, la Dirección General de Política Territorial y Paisaje, para minimizar su impacto", han asegurado. "En otros emplazamientos, como Altea, acuicultura y turismo han convivido durante años sin problemas, y son frecuentes los ejemplos en países con amplia tradición pesquera y turística en los que las tres actividades conviven o incluso crean sinergias", han concluido.
Reacción de la alcaldesa
Tras la reunión, la alcaldesa de la localidad, Ana Sala, ha confirmado a este medio que el encuentro con la promotora no ha hecho cambiar la postura de su Equipo de Gobierno. "Nos pidieron audiencia y les hemos atendido sin problemas porque somos una institución, pero no vamos a cambiar nuestro criterio ni nada en ningún sentido", ha explica. "Les hemos dicho que seguiríamos nuestro camino", ha añadido.
"Vamos a seguir luchando", ha repetido en varias ocasiones. Se refiere, por un lado, al recurso de reposición presentado ante la Generalitat Valenciana, el órgano competente, para tratar de frenar la ampliación de la piscifactoría. De momento, se mantienen a la espera de que el Consell se pronuncie, aunque da prácticamente por hecho que presentarán un contencioso-administrativo para llevar a juicio a la empresa.
"Es una aberración esa macrogranja marina, es que está muy cerca de la orilla, se ve claramente delante de la playa del Arenal", denuncia. "Aquí teníamos una mini granja marina hace 20 años pero no estaba donde está ahora, estaba más lejos. y ellos empezaron con el proyecto de ampliación hace una década y el ayuntamiento siempre ha alegado y así hemos conseguido retirarla a otro espacio", agrega.
"Les hemos dicho que no estamos en contra de ninguna inversión y que en la Bahía de Calpe no lo queremos, que tenemos un parque único como el del Peñón de Ifach", afirma la alcaldesa.