El director deportivo del Elche CF, Chema Aragón, aseguró este sábado que, para afrontar una competición tan dura como la Segunda División, los jugadores tienen que tener “buen pie y buenas piernas”, en referencia a que es necesaria una mezcla de calidad y fortaleza física.
El técnico vallisoletano, en declaraciones a los medios del club recogidas por la agencia Efe, recordó que tanto en Guijuelo como en el Mirandés diseñó equipos de “rock and roll”, en alusión a su estilo de juego, si bien precisó que siempre “dando importancia a la pelota, que es la esencia”.
“Aquí tendremos más herramientas, como el estadio, y eso ayuda al juego”, explicó el entrenador, quien reiteró la importancia de contar con jugadores de talento que sean capaces de conectar con el aficionado, pero también trabajadores para el equipo.
En cuanto a la apuesta por el entrenador, Eder Sarabia, Aragón recordó que el vasco fue capaz de cambiar la dinámica del Andorra, ascender a Segunda y rozar la promoción a Primera.
“Es verdad que los datos de la última temporada son negativos, pero el equipo hacía muchísimas cosas bien”, declaró el director deportivo, quien desveló que en su cargo es necesario realizar muchos kilómetros “para tener siempre la mayor información”.
Chema Aragón aseguró que no resulta difícil convencer a los jugadores para que acepten la oferta del Elche “porque se trata de un estadio de Primera, con una ciudad bonita y unos alrededores que acompañan”.
“Los jugadores están locos por la música, otra cosa es que luego haya acuerdos económicos”, precisó el castellano, quien valoró la importancia de los datos para conocer a un futbolista, si bien se mostró más partidario del “ojo”.
Distintos estamentos
Aragón explicó que su paso por diferentes estamentos del fútbol, como periodista, entrenador y representante, le ha ayudado mucho a entender este deporte y destacó que la clave para tener éxito pasa por “vivir la profesión con pasión e ilusión”.
El director deportivo destacó como uno de los jugadores que más le han marcado a Jon Guridi “porque es un espejo y un ejemplo”, a pesar de todas las dificultades que ha tenido en su carrera por las lesiones.
“No es el de más talento, pero al final le das la nota más alta. Esa calvita que tiene es la bombilla que ilumina un vestuario”, comentó Aragón, que también se mostró orgulloso del éxito que han obtenido los entrenadores que han trabajado con él, como Andoni Iraola, Borja Jiménez o Joseba Etxeberría.
“Me gustaría ahora con Eder Sarabia ponerme a la altura de lo que hemos hecho con los anteriores”, sentenció.