Desde Orihuela, el pueblo de Miguel Hernández y el de Rafael Lozano, surge como un rayo un espectáculo para quien tanto quería recordar al poeta. Ese es el propósito de Miguel, el montaje que parte de sus versos para musicalizarlos y crear un cortometraje. Ese es el material con el que se le rendirá homenaje en el ADDA el 29 de diciembre.
Lozano empieza orgulloso la charla recalcando su origen oriolano, de quien vive "a escasos metros de la casa natal de Miguel Hernández". Y reconoce su emoción por el que define "el proyecto más ambicioso e importante al que me he enfrentado".
El compositor ya trabajó en 2017 en esta línea alrededor de la figura de su vecino a través de su agrupación Lux Aeterna. Entonces presentaba la musicalización que había preparado de sus poemas. "
¿Qué es Miguel? Es el protagonista de este proyecto que inicié a través de la asociación Lux Aeterna, que trabaja en la difusión de la obra de Miguel Hernández. En su 75 aniversario se me ocurrió musicalizar los poemas. "Y tenía que transmitir desde mi infancia, con todos los libros, y con la experiencia de mi padre que estudió en Santo Domingo, en la misma aula que estudió Miguel Hernández que aunque no pasó un tiempo muy largo porque lo sacó su padre, quería transmitir eso", recuerda.
Música al mito
Poner música a estos versos es un reto para cualquiera, y para el que Lozano reconoce que era un hándicap a superar con el bagaje de dos décadas dando conciertos con diferentes formaciones camerísticas. ¿La razón? Serrat.
En 1972, el mismo año que nacía Lozano, el cantautor publicaba el disco dedicado al poeta. "Serrat era ya muy conocido e hizo mucho bien por la obra de Miguel Hernández porque gracias a esos conciertos por España e Iberoamérica ese mensaje hernandiano caló en la sociedad", explica.
En este medio siglo, muchos de los homenajes que se le hacen al autor oriolano aprovechan esas melodías. Las que compuso en Elegía o Para la libertad están en la cabeza de muchos cuando ahora los leen. "Y quería ser original", remarca sobre este proyecto.
La propuesta
Así presenta estas "creaciones originales en torno a su obra literaria: en este proyecto fusionamos las artes escénicas de la mano de grandes creadores de su tierra". De ese trabajo sale el conjunto de versos que dan paso a monólogos sobre la vida de Josefina Manresa y se ilustran con nuevos dibujos y un cortometraje.
Con el dibujante Paco Sáez, que trabajó en proyectos como Tadeo Jones o Atrapa la bandera, la actriz Marta Bascuñana y el director Rafael Bascuñana une estas diferentes disciplinas. Una fusión en la que confía para seducir a los espectadores que ya conocen la obra literaria del homenajeado y transmitir "ese mensaje universal de paz y fraternidad que todos los hernandianos saben".
El choque con Lorca
Ahí Lozano recalca esa voluntad de "transmitir la gran humanidad de su persona y la cercanía que tenía con la gente". "Esa personalidad", apunta, "era totalmente opuesta a García Lorca, que era muy orgulloso y prepotente". Y para afirmar eso se basa en una complicada relación que nació en Murcia, donde "tuvieron un atranque un poco fuerte, porque llegó con aires de grandeza". Frente al escritor reconocido, el emergente "Hernández, que era un poeta cabrero. Y cuando le dijo que iba a ser el poeta más importante del panorama nacional, le cogió un poco de manía, y el círculo lorquiano no le acogió bien".
Ahora, Lozano reivindica "esa humanidad, esa vida sencilla" del poeta que "no estudió el tiempo suficiente para tener los conocimientos de los grandes autores, como Góngora", pero que sí "leyó mucho". "Esa es la esencia, un grande de las letras en una mente y cuerpo e ideología muy llana y asequible".