Amor, humor y aceptación. Tres conceptos sobre los que Fran Ferriz centra su novela gráfica Yo también tengo miedo sobre salud mental. "Puede ayudar mucho, precisamente, no a curar, pero sí a intentar sanar un poco", cuenta una vez con el libro entre manos.
Es la nueva etapa de un proyecto que empezó en abril de 2023 con una campaña de financiación colectiva. Entonces centraba su mensaje en el humor, ahora, ya finiquitado, se enorgullece de un proceso de creación en el que ha añadido a la mezcla el amor y la aceptación a esta historia de la que rechaza el concepto de libro de autoayuda.
"Esos dos términos son claves en la novela. De hecho, cuando me puse a escribir, por diversas circunstancias, la idea inicial varió un poco. El humor sigue estando ahí, la salud sigue estando ahí, pero conforme vas trabajándolo van surgiendo nuevas. Es mejor de lo que en un principio yo tenía en la cabeza. Mejoró con el proceso, con el paso del tiempo", razona sobre estos meses de trabajo.
¿Qué es Yo también tengo miedo? Su protagonista es Dante, un ilustrador con diversos trastornos mentales que tiene que convivir con unas sombras que habitan y comparten su cerebro con él. Una definición que, como reconoce, "efectivamente tiene mucho de mí, aunque no soy yo" como puntualiza.
Lo que prometen desde la editorial es "una novela muy gamberra" y lo que Ferriz adelanta es que "sorprende". "Y es que creo que ya no solamente el amor romántico, que es importante, y que a una persona con problemas de salud mental se la cuide no solamente desde la psicología, sino también desde el amor y desde la aceptación", razona.
De ahí que incida en que "la sensación de estar enamorado es fantástica". A lo que añade que "el amor creo que también puede ayudar mucho, precisamente, no a curar, pero sí a intentar sanar un poco esos problemas de salud mental". Tanto es así que "cuando la gente que te quiere acepta que eres así y te pasan determinadas cosas y te quieren igualmente, creo que eso es muy bonito".
Con el proyecto ya en manos del público, toca ir pensando en lo siguiente. "Ahora mismo me divierte más o me llena más escribir que ilustrar. Escribiendo me lo paso muy bien. Me meto en mundos diferentes, pero estoy metido ahí de verdad. Y lo vivo de verdad. Y lo disfruto muchísimo", asegura.
El camino que ha hecho lo resume así: "Hasta ahora había estado ilustrando las historias de otros y lo que me apetecía era contar mis propias historias. Y no sé si voy a continuar yéndome más hacia la escritura o terminaré haciendo otras cosas porque soy un culo inquieto y necesito probar cosas nuevas".
¿Y qué cosas pasan por esa mente inquieta que tanto le gusta recrear en dibujos? "Uno de mis sueños por ejemplo sería estar metido en otras tareas como la dirección de cine o televisión. Me gustaría tener la posibilidad de ser showrunner, crear nuevas franquicias o proyectos audiovisuales. Tengo muchas ideas en la cabeza, lo que pasa que también soy consciente de que es algo muy difícil", responde.
Por ese camino ya fue pasando en etapas anteriores, como cuando trabajaba para Famosa o como cuando estuvo trabajando para un proyecto de Ridley Scott. "La idea es expandir mi universo a todos los formatos posibles, pero ahora siempre desde la perspectiva de que quiero que sean mis historias", concluye.