Los grupos municipales de PP y Vox han llegado a un acuerdo sobre la Ordenanza Reguladora de la Zona de Bajas Emisiones (ZBE) de la ciudad de Alicante, que no contempla sanciones ni restricciones al tráfico.
La ordenanza se aprueba este martes en la Junta de Gobierno Local y en los próximos días pasará el trámite de la comisión municipal correspondiente antes de su aprobación definitiva en Pleno, con el objetivo de que entre en vigor en enero de 2025.
La aprobación de esta ordenanza se hace efectiva en cumplimiento de la normativa europea (Ley 7/2021 de Cambio Climático y Transición Energética), que obliga a todas las ciudades de más de 50.000 habitantes a implantar ZBE para mitigar las emisiones de gases de efecto invernadero de los vehículos.
En concreto, la ZBE de Alicante se orienta al fomento de la movilidad sostenible, la desincentivación de las alternativas más contaminantes y la educación ciudadana para generar hábitos más saludables. Las actuaciones en esta ZBE se deben conjugar, además, con mejoras del espacio público para peatones y ciclistas, como las actuaciones recientes en el frente litoral, la avenida de la Constitución y el eje Gadea-Soto-Marvá.
ZBE: tres anillos
El ámbito de aplicación de la ZBE se configura en el marco de tres anillos convenientemente señalizados: el primero se circunscribe al Casco Antiguo, el segundo al centro tradicional y el tercero está delimitado por la circunvalación urbana de la Gran Vía.
Todos los vehículos podrán circular libremente por los anillos II y III, correspondientes al centro tradicional y la Gran Vía, sin restricciones ni sanciones, mientras que en el entorno del Casco Antiguo (anillo I) se mantiene una zona señalizada con limitación de accesos.
Alicante dispone desde 2011 de esa zona con limitación de accesos en el interior del perímetro comprendido por el Casco Antiguo, entre la Rambla de Méndez Núñez, la avenida de Jaime II, la ladera del Castillo de Santa Bárbara y las calles Jorge Juan y Altamira, con más de 10 hectáreas de superficie, en la que se limita la entrada de vehículos, mediante controles de acceso, a vecinos, comerciantes o vehículos autorizado, de modo que se utilice este espacio como “zona residencial” con prioridad del peatón respecto al vehículo.
Del mismo modo, todos los vehículos podrán entrar y circular sin necesidad de verificación de la etiqueta ambiental en los anillos II y III (centro tradicional y Gran Vía), que servirán como zonas de estudio, monitorización y toma de datos para una gestión más eficiente de la movilidad en la ciudad y para ayudar en el futuro a la toma de decisiones relacionadas tanto con el tráfico y la ZBE como con otros servicios municipales.
En la línea de promover el uso de vehículos menos contaminantes que preconiza la ZBE, el Ayuntamiento de Alicante ya ofrece bonificaciones fiscales en el Impuesto sobre Vehículos de Tracción Mecánica (IVTM) por bajo consumo y emisión de contaminantes. Estos incentivos fiscales llegan hasta el 75%, según la calificación energética, y son accesibles para vehículos eléctricos y aquellos que no superen la tasa de 160 gramos por kilómetro de emisión de CO2.
La implantación de esta Zona de Bajas Emisiones tendrá una vigencia permanente y es coherente con los instrumentos municipales de planificación urbana estratégica y la normativa de calidad del aire y de acción contra el ruido.
El Ayuntamiento fomentará la concienciación ciudadana y la educación ambiental, pilares de esta ordenanza en aras a seguir avanzando en la mejora de la calidad del aire. Para conseguir más información sobre la ZBE se puede consultar la web municipal y las oficinas de atención ciudadana del Ayuntamiento. Y próximamente entrará en servicio una plataforma informática para realizar cualquier trámite, autorización, gestión o consulta al respecto.
Gestión eficiente del tráfico
"Con esta ordenanza, la ciudad de Alicante convierte la obligación de implantar una Zona de Bajas Emisiones en una nueva oportunidad para contar con una ciudad más saludable, más inteligente y con mayor calidad de vida para los alicantinos", ha destacado el vicealcalde y concejal de Medio Ambiente, Manuel Villar.
El edil ha agregado que la implementación de la ZBE en Alicante también reporta “un considerable incremento de las inversiones en obras de transformación urbana de gran envergadura como la rehabilitación del frente litoral en el Paseo de los Mártires de la Libertad, la peatonalización de la avenida de la Constitución y la regeneración del eje Gadea-Soto Marvá, que han supuesto un considerable avance para el calmado de tráfico y la mejora de la accesibilidad peatonal tras una inversión conjunta de más de ocho millones de euros”.
Por su parte, la portavoz de Vox, Carmen Robledillo, ha destacado que con esta ordenanza “se da cumplimiento a una de las exigencias de nuestra formación incluidas en el acuerdo para la aprobación de los Presupuestos de 2024".
A su vez, el portavoz adjunto de esta formación, Mario Ortolá, ha añadido que esta normativa sobre la ZBE “cumple con lo que Vox viene exigiendo desde 2021, que no es otra cosa que el no discriminar entre alicantinos que puedan permitirse un coche eléctrico y alicantinos que se vean obligados a moverse por Alicante en patinete o bicicleta, además de no hundir los pequeños negocios con sanciones previstas para el 70% del caso urbano, que es lo que preveía la ZBE original".