Alicante

Es casi seguro que el conflicto sobre la soberania del Sahara Occidental será uno de los temas centrales a debatir en la cumbre euromediterránea del próximo viernes en Alicante. Aunque, según fuentes francesas, este debate no forma parte de la agenda oficial

Fuentes del Elíseo señalaron que las consecuencias que tiene ese conflicto en el contexto de crisis energética y el abastecimiento de gas en Europa pueden incluir el tema en las conversaciones entre jefes de Estado y/o Gobierno de los nueve países del sur de la Unión Europea (UE), además de la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, y el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel.

La crisis energética ocupará la primera sesión de trabajo y las fuentes francesas avanzaron que se tratará de las relaciones con los países de la orilla sur del Mediterráneo, aunque no se haya previsto específicamente hablar del conflicto sobre el Sahara Occidental.

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Ese contencioso, que enfrenta a Marruecos (que considera que el Sahara Occidental forma parte de su territorio) con Argelia (que defiende a los independentistas del Frente Polisario), está afectando al aprovisionamiento de gas.

Argel ha cerrado el grifo en dirección de Marruecos, que luego enviaba una parte a España, y ha reducido el flujo en el gasoducto directo Argelia-España después de que Madrid cambiara su posición en marzo sobre el Sahara Occidental.

El Elíseo insistió en que querría que "las relaciones entre los países ribereños del Mediterráneo sean las mejores posibles" a la vista de esas implicaciones, y en que está a favor de que haya un acercamiento.

Otro asunto que debería examinarse en la cena de los jefes de Estado y/o de Gobierno de Alicante, dedicada a asuntos internacionales, es el de las fricciones de Turquía con Grecia, reavivadas últimamente desde Ankara.

Los líderes europeos, según Francia, se reafirmarán en la línea de que se tiene que respetar el derecho internacional y la integridad territorial de Grecia y de que Turquía tiene que renunciar a "las maniobras de intimidación".

Uno de últimos viajes de Draghi

El primer ministro italiano en funciones, Mario Draghi, acudirá este viernes a Alicante para participar en la Cumbre Euromediterránea de jefes de Estado y/o de Gobierno de nueve países del arco mediterráneo (Med9), confirmaron de la presidencia del Ejecutivo.

Se trata de uno de los últimos viajes de Draghi como mandatario, tras las elecciones generales celebradas el pasado domingo, en las que se impuso la coalición de derechas que lidera la ultraderechista Giorgia Meloni, quien ocupará su puesto en las próximas semanas.

El exdirector del Banco Central Europeo, como es habitual, viajará el mismo viernes a Alicante para participar en la Cumbre, tras la cual regresará a Roma, sin que tenga previsto ningún acto oficial más allá de la agenda de la reunión de los jefes de Gobierno del Mediterráneo, añadieron las fuentes.

La crisis energética derivada de las tensiones geopolíticas con Rusia será el tema principal de la Cumbre de los mandatarios de Francia, Italia, España, Portugal, Grecia, Chipre, Malta, Eslovenia y Croacia, además de la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, y el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel.

Según fuentes francesas, y aunque no esté previsto en la agenda oficial, el conflicto sobre la soberanía del Sahara Occidental entrará "seguramente" en los debates de la cumbre dadas las consecuencias que tiene en el contexto de crisis energética y el abastecimiento de gas en Europa.

Ese contencioso, que enfrenta a Marruecos (que considera que el Sahara Occidental forma parte de su territorio) con Argelia (que defiende a los independentistas del Frente Polisario), está afectando al aprovisionamiento de gas, pues Argel ha convertido a Italia en su socio prioritario en lugar de España, después de que Madrid cambiara su posición oficial en marzo sobre el conflicto.

Draghi presentó su dimisión en julio pasado, tras perder la mayoría que sustentaba su Gobierno de "unidad nacional", en el que estaban integrados todos los partidos menos el de Meloni, a la postre la gran triunfadora de las elecciones anticipadas que se convocaron después de que el economista anunciase su intención de dejar el cargo.