Alicante

Los delitos sexuales en la provincia de Alicante están descontrolados. Cada día más de dos se cometen en sus calles y hogares. La provincia ha registrado un total de 920 infracciones en esta categoría el pasado año, lo que equivale a un promedio superior a 2,5 infracciones sexuales por jornada. Pero lo más preocupante es el cambio de objetivo de estos delincuentes, que han centrado su mirilla en los menores y en las personas con discapacidad.

Los datos totales de infracciones sexuales del 2023 reflejan un incremento del 260 % respecto a los números de hace una década, según cifras del Ministerio de Interior. La alarmante tendencia, lejos de frenarse ha cogido velocidad y en el primer trimestre del 2024 este tipo de acciones contra la libertad sexual han crecido un 25 %.

Los delitos contra la libertad sexual se dividen en varias subcategorías que se diferencian por la gravedad del delito y la víctima de los mismos. En 2023, la infracción que más se cometieron son las agresiones sexuales, con 573 incidentes, es decir, casi una vez y media cada 24 horas. De estas, 208 corresponden a agresiones sexuales con penetración, un delito aún más grave que se comete una vez en menos de dos días.

Pero, sin duda, lo más llamativo es el desorbitado aumento de casos contra menores y personas con discapacidad, con 141 sucesos de corrupción. Si estas cifras parecen altas, el problema alcanza una nueva dimensión si se echa la vista atrás y se analiza cómo estaba la situación en la provincia hace una década. Esta categoría muestra un crecimiento drástico de más del 1.000 %, al pasar de solo 12 casos en 2014 a los 141 actuales.

La corrupción de menores y personas con discapacidad consiste en hacerles participar en un comportamiento de naturaleza sexual que perjudique la evolución o desarrollo de su personalidad, y se castiga con la pena de prisión de seis meses a un año o multa de seis a doce meses.

Comparación respecto a hace 10 años

En el 2014 se registraron 350 delitos contra la libertad sexual en Alicante, lo que significa que en menos de diez años la cifra se ha multiplicado por 2,6. Las agresiones sexuales han pasado de 184 en 2014 a 573 en 2023, un aumento del 211 %. Los casos de agresión sexual con penetración, por su parte, se han más que triplicado, desde los 57 casos registrados en 2014.

La pornografía infantil no se libra y también ha experimentado un aumento significativo del 850 %, de 34 casos en 2014 a 323 en 2023. Incluso los "otros delitos contra la libertad sexual", que podrían parecer menos graves, han subido en este período de 63 a 93 casos.

Los datos de 2010, el primer año en del que se tienen estadísticas, ofrecen una perspectiva aún más amplia. En aquel año, se registraron 390 delitos contra la libertad sexual, un número ya considerable, pero muy por debajo de los dígitos actuales.

Los datos más recientes del Ministerio del Interior abarcan de enero a marzo de este 2024. Los relacionados con la libertad sexual se inflan un 24 %, con 230, las agresiones con penetración pasan de 44 a 54 (+22 %), así como otros delitos de carácter sexual, que aumentan un 25 % con 35 nuevos casos. Esto supone que en tan solo 90 días se han registrado dos terceras partes de los ocurridos hace diez años durante los 12 meses.

Futuro preocupante

Si esta tendencia continúa, los próximos años podrían traer cifras aún más infladas. Basándose en el ritmo de crecimiento de la última década, se puede estimar que en 2027 Alicante podría registrar cerca de 2.400 delitos contra la libertad sexual.

Para 2030, las proyecciones apuntan a una cifra que podría superar los 3.000 delitos anuales, acercándose peligrosamente a una media de diez delitos diarios. Y si la tendencia se mantiene, para 2033, Alicante podría enfrentar más de 5.000. 

La estimación, realizada a modo de ejemplo, se ha realizado teniendo en cuenta el crecimiento anual compuesto (CAGR) de los delitos sexuales en Alicante entre 2010 y 2023, que es aproximadamente 7 % por año.