Localizan en Alicante a un fugitivo argelino que se enfrenta a cadena perpetua por tráfico de drogas

La Policía Nacional ha localizado y detenido en la ciudad de Alicante a un varón, de origen argelino, que estaba siendo buscado por las autoridades de su país, y sobre el que pesaba una Orden Internacional de Detención para Extradición (OIDE) por delitos de tráfico de drogas y pertenencia a organización criminal. 

El fugitivo fue localizado por agentes de la Unidad de Drogas y Crimen Organizado (U.D.Y.C.O.) de la Brigada Provincial de Policía Judicial de Alicante tras una serie de averiguaciones y gestiones policiales, dando finalmente con el paradero de esta persona que se encontraba residiendo en una vivienda de Alicante.

En la detención, que se produjo gracias a un rápido operativo policial, también participaron agentes pertenecientes al Grupo Operativo de Respuesta (G.O.R.) de la Comisaría de Distrito Norte de Alicante.

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Las autoridades argelinas le acusan de guardar relación con una organización criminal dedicada al tráfico de drogas, tras la detención de un miembro de esta organización en el puerto de Orán (Argelia) que fue sorprendido en el año 2019 trasportando 1.327 kilogramos de cocaína.

Según consta en la orden de detención emitida en el año 2020 por INTERPOL, este fugitivo se podría enfrentar a cadena perpetua en Argelia por estos hechos.

El detenido, de nacionalidad argelina y de 46 años de edad, fue puesto a disposición del Juzgado Central de Instrucción de la Audiencia Nacional, órgano encargado de realizar los trámites para su posterior extradición.

Estafas por internet

Por otro lado, la Guardia Civil ha procedido a la detención de una persona que se dedicaba a estafar desde una conocida plataforma de compraventa online. Al detenido llevaba más de una década huido de la justicia, se le atribuyen los supuestos delitos continuados de estafa y usurpación del estado civil, blanqueo de capitales y contra la propiedad industrial.

En la operación se ha logrado identificar a 233 personas en todo el territorio nacional, así como a 61 personas y 7 empresas a quienes les habían suplantado la identidad y que habían sido estafadas y se han localizado más de 180 cuentas bancarias utilizadas para desviar el dinero de las estafas. Se estima que el autor habría podido estafar más de 55.000 euros. 

La operación se inició en enero del pasado año, cuando la Guardia Civil recibió la denuncia de una persona en Bizkaia, donde manifestaba haber sido víctima de una presunta estafa, al adquirir una consola de videojuegos a través de Internet y nunca recibir el producto.