La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) ha informado de un importante descenso de las temperaturas a partir de este sábado en la Comunidad Valenciana, con los días más fríos el domingo, lunes y martes -por debajo de los 4 grados-, las más bajas registradas este mes en los últimos dos años.
Después de un periodo muy largo con temperaturas superiores a lo normal el invierno ha llegado para quedarse y el ambiente frío persistirá los próximos diez días, según las primeras estimaciones de Aemet hasta el 29 de enero.
Los primeros 17 días de enero la temperatura media en la Comunidad Valenciana se ha situado por encima de la media de este mes en el promedio de los años 1981 a 2010, que fue de 8 grados, con puntas de hasta 13º (cinco grados más) el 8 de enero y de 11 grados el pasado día 17, cuando empezaron a descender.
Aemet prevé un cambio a partir de este vienes, con un descenso importante de las temperaturas, que el domingo bajarán a los 4 grados y el martes a los 3 grados.
A partir del martes subirán un par de grados y se prevé que el jueves 26 alcancen los 6 grados para volver a bajar el viernes 27, sábado 28 y domingo 29, con registros de entre 5 y 4 grados.
Heladas en el interior
Aemet informa asimismo de que a partir de este domingo las heladas van a ser generalizadas en el interior, y el lunes y martes no se descarta que de forma débil afecten a puntos del litoral.
Entre los restos de la borrasca Hannelore y el anticiclón atlántico va a penetrar por el nordeste una masa de aire frío continental.
El viento va a calmarse, las noches son muy largas, el aire que entra es frío y seco, por lo que los cielos estarán despejados.
Todos estos ingredientes van a favorecer que las próximas noches sean muy frías y por el día las temperaturas también van a ser inferiores al promedio normal, aunque con viento flojo y cielo despejado no será tan intensa la sensación de frío.
Aemet indica que no se esperan precipitaciones ni viento fuerte los próximos días y el fenómeno más adverso van a ser las temperaturas, sobre todo las nocturnas, que van a ser las más bajas de los dos últimos años.