Agentes de la Guardia Civil han detenido a tres personas tras descubrir una plantación de marihuana en escondida en un chalé de Aguas de Busot (Alicante). La operación Rojus, dentro del marco de la operación nacional 'Miller', ha terminado con los dos jefes de la organización criminal en prisión provisional.
Las investigaciones se iniciaron en el mes de septiembre del presente año, cuando agentes del Puesto Principal de la Guardia Civil de El Campello con la colaboración del Puesto de la Guardia Civil de Jijona, hallaron indicios para pensar que, en el interior de un chalet ubicado en Aguas de Busot, se encontraba una plantación de marihuana.
Al tratarse de una urbanización de chalets adosados con piscina independientes, a los agentes, entre otras cosas, les llamó la atención como el resto de vecinos tenían las piscinas con agua con tratamiento con cloro, y sin embargo, la investigada no utilizaba ningún tipo de tratamiento, teniendo por lo tanto la misma un color diferente al resto, concretamente verdoso. Por ello, dedujeron que dicha piscina era utilizada como depósito de agua para el riego de la plantación ilegal.
Tras un arduo estudio de toda la documentación, el Área de Investigación de El Campello localizó la vivienda donde uno de los responsables de la plantación vivía junto a su familia. Se trataba de una vivienda de lujo ubicada en el Cabo de las Huertas de Alicante.
El día 9 de noviembre, tras identificar a todos los responsables de la supuesta plantación de marihuana, los agentes procedieron a la explotación de la operación. Para ello, los agentes del Puesto Principal de El Campello, se apoyaron en la Unidad de Seguridad Ciudadana de la Guardia Civil (USECIC) de Alicante, Puesto de la Guardia Civil de Jijona, Unidad de Medios Aéreos de la Policía Local de Elche, Servicio Cinológico de la Comandancia de Alicante y Policía Local de Bussot.
En el registro realizado en Aguas de Busot, se localizaron dos sofisticadas plantaciones de marihuana de alto rendimiento tipo indoor. La instalación era compleja, por un lado los habitáculos de la vivienda estaban perfectamente aislados para evitar fugas de calor y olores que pudiesen levantar sospechas, mientras por otro lado un moderno sistema domótico a través de wifi controlaba la temperatura y la intensidad de la luz.
Además, los agentes descubrieron un novedoso sistema que aportaba a las plantas anhídrido carbónico en estado gaseoso, con la finalidad de acelerar el rendimiento de la cosecha. Los investigadores localizaron un sistema de cableado que permitía obtener de manera fraudulenta la electricidad necesaria para mantener toda la logística necesaria para la plantación, mediante un puenteado a la red pública, siendo el perjuicio económico ocasionado en alrededor de 37.000 euros.
En el segundo registro realizado en el Cabo de las Huertas de Alicante, se hallaron dos chalecos antibalas y diversa documentación.
Tras los registros realizados, los agentes intervinieron 100 kilogramos de marihuana, dos vehículos de gama media tipo turismo, diverso material utilizado para el cultivo de las plantas, así como documentación para su posterior estudio y análisis.
En estos dos registros, se ha detenido a los integrantes del grupo criminal, 2 hombres, uno de nacionalidad letona y otro lituano, y una mujer también lituana, todos ellos de edades comprendidas entre los 25 y 40 años. Todos han sido encausados por los delitos de organización criminal, tráfico de drogas, defraudación de fluido eléctrico y blanqueo de capitales.
Los dos varones, líderes de la banda y con antecedentes policiales por hechos relacionados con delitos contra el patrimonio, junto con los efectos intervenidos, han sido puestos a disposición del Juzgado de Guardia e Instrucción de San Vicente del Raspeig, quien ha decretado el ingreso en prisión provisional de ambos.