Agentes de la Policía Nacional han detenido en Benidorm a un prófugo de la justicia suiza por cometer tres atracos a mano armada en entidades bancarias en los que logró un botín cercano a 75.000 euros, que ha sido puesto a disposición judicial.

Sobre el detenido pesaba una orden europea de detención para extradición como presunto autor de tres atracos cometidos durante los primeros meses del año 2018, el primero de ellos en una sucursal bancaria de la localidad suiza de Ebikon.

El autor entró en la sucursal sobre las tres de la tarde y se aproximó a un mostrador con una pistola en la mano, dejando una nota reclamando dinero al empleado de la entidad bancaria. Consiguió un botín de 27.130,40 euros y escapó del lugar en una motocicleta.

Un mes después, siguiendo el mismo patrón, volvió a personarse en la misma sucursal y obtuvo un botín de 13.000 euros.

El tercer hecho lo cometió aproximadamente tres meses después, en Emmen, a ocho kilómetros de la primera, donde utilizó el mismo modus operandi para hacerse con 30.000 euros.

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En los tres robos actuó con un cómplice, según la orden de detención. Dos meses después trató de cometer un nuevo robo en la misma sucursal donde robó las dos primeras veces, pero no logró abrir la puerta.

La detención en Benidorm se produjo al advertir agentes que estaban en labores de seguridad ciudadana una actitud huidiza y sospechosa cuando éste se percató de la presencia policial, por lo que realizaron una identificación rutinaria y descubrieron que tenía una orden de detención.

Cuando iban a detenerle, comenzó a golpear a los policías con patadas y puñetazos. El detenido, de 30 años y nacionalidad italiana, tenía un antecedente previo en España.