Agentes de la Policía Nacional han detenido en Elche a un varón acusado de cometer presuntamente dos robos con fuerza en establecimientos de hostelería de la ciudad, uno de ellos en grado de tentativa. El presunto ladrón fue localizado en el Hospital del Vinalopó, a donde había acudido al haberse producido un profundo corte en el brazo cuando rompió el cristal de la ventana del establecimiento.

Los agentes del Grupo III de Policía Judicial de la Comisaría de Elche, Grupo de Robos, andaban tras la pista del autor de un robo ocurrido en un establecimiento de hostelería ubicado en el barrio ilicitano de Carrús, ocurrido el pasado mes de mayo.

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Incluso contaban con imágenes de las cámaras de seguridad del local, en el que el autor tuvo que salir huyendo del lugar cuando se activó el sistema de alarma, cuando accedió al local después de haber forzado la persiana del establecimiento.

Ese suceso se ha resuelto gracias a la intervención policial en un nuevo robo, donde el autor en este caso fracturó el cristal de una ventana para acceder a un establecimiento de hostelería ubicado a pocas calles del robo sometido a investigación.

Una dotación del Grupo de Atención Ciudadana, fue comisionada por el CIMACC-091 al lugar, al haberse activado el dispositivo de alarma del establecimiento. Al llegar allí, encontraron un abundante resto de sangre en torno a la ventana de la cual, habían fracturado el cristal. Los agentes presumieron que el autor de los hechos se había cortado con los cristales.

Tras realizar los agentes una primera inspección en busca de indicios que les llevaran a la localización del autor, los investigadores siguieron los restos de sangre e indagaron en varios centros sanitarios, ante la sospecha de que pudiera haber acudido a un centro de salud para ser curado.

Finalmente, localizaron en el Hospital del Vinalopó a un individuo con un corte profundo en el antebrazo izquierdo, quien resultó ser el presunto autor del robo tras cotejar los indicios hallados en el lugar del suceso. Fue detenido en ese instante, aunque continuó ingresado debido a que tenía que ser intervenido quirúrgicamente.

Más de 50 antecedentes

En cuanto al robo en sí, la víctima manifestó, que a principios del mes de mayo le habían robado también del mismo modo y que el botín obtenido ascendía a 2.000 euros en efectivo.

Rápidamente, se canalizó la información hacia el grupo de investigación de robos de la Comisaría, quienes cotejaron las imágenes del autor del robo que estaban investigando con las del recientemente detenido por los agentes.

Allí pudieron comprobar que se trataba del mismo individuo, por lo que le fueron imputados también estos hechos, continuando las investigaciones para determinar si pudiera estar involucrado en más robos.

El detenido, de nacionalidad española, de 41 años de edad, con más de 50 de antecedentes policiales, fue puesto en libertad tras prestar declaración desde el mismo hospital donde continuó ingresado a la espera de ser intervenido, quedando a la espera de comparecer en sede judicial.