Una patrulla de la Policía Local de Elche se encontró de madrugada en la avenida de la Libertad con un automóvil que transportaba en una caja un gallo malherido, y que intentó dar esquinazo a los agentes. Posteriormente, el veterinario de la Protectora de Alicante determinó la gravedad de las lesiones del animal y su relación con combates recientes, pudiendo incurrir su propietario en un delito de maltrato animal.
Los hechos ocurrieron en la madrugada del sábado 7 de mayo. Una patrulla del cuerpo de seguridad municipal se encontró con un vehículo en la avenida de la Libertad que, al advertir de la presencia policial, realizó una maniobra evasiva para esquivarla. Los agentes ordenaron entonces al vehículo que se detuviese.
Los policías, quienes preguntaron a los ocupantes del automóvil por su reacción, se percataron en ese momento de la existencia de un animal dentro de una caja en el interior del habitáculo.
Dentro del contenedor se hallaba un gallo vivo "con evidentes lesiones y sangre reciente en el plumaje y en el propio recipiente". Al ser preguntados nuevamente por el motivo de encontrar al ave en ese estado, el que se identificó como el propietario dio una respuesta poco convincente. Los agentes procedieron entonces a la intervención de animal para su traslado a la Protectora de Animales y Plantas de Alicante, situada en la partida de Bacarot.
En días posteriores, el veterinario de la entidad emitió un informe señalando que las lesiones y mutilaciones del gallo correspondían con las de uno destinado a peleas.
Actividad "en auge"
Por tales motivos, los agentes comparecieron ante la autoridad competente para dar cuenta de un posible delito de maltrato animal, que contempla penas de privación de libertad de tres meses a un año y la inhabilitación especial de la tenencia, la comercialización y el desarrollo de profesiones relacionadas con la fauna.
Las peleas de gallos están prohibidas en la Comunidad Valenciana, al igual que en la mayor parte de Europa. Solo hay dos regiones en España que aún las permiten: Andalucía y Canarias.
Aún así se siguen produciendo este tipo de actos clandestinos. Hace una semana el fiscal de Medio Ambiente de la Fiscalía de Valencia, Eduardo Olmedo, alertó en una comparecencia en las Cortes para hablar de la futura ley de Bienestar Animal de la Comunidad del "auge" en la capital valenciana de los cortes de crestas y de barbas de gallos -una alteración que se hace para utilizarlos en peleas-, un asunto que "va a más" y que es "una barbaridad".