El obispo de San Sebastián asumirá en febrero la Diócesis de Orihuela y Alicante
José Ignacio Munilla llevaba 11 años en País Vasco, después de haber sido nombrado obispo de Palencia por Benedicto XVI. Releva a Murgui tras 9 años.
7 diciembre, 2021 14:07Noticias relacionadas
El actual obispo de San Sebastián, José Ignacio Munilla Aguirre, se convertirá el próximo 12 de febrero en el nuevo obispo de la diócesis Orihuela-Alicante, según ha confirmado este martes el actual obispo alicantino, Jesús Murgui Soriano, que ha renunciado por edad a su cargo, en el que llevaba más de nueve años.
En una rueda de prensa, Murgui ha destacado que el futuro obispo es una persona "experimentada, probada, inteligente y decidida", al tiempo que ha explicado que pese a su renuncia, seguirá como administrador apostólico de la diócesis hasta el nombramiento de su sucesor, cuando pasará a ser obispo emérito.
Nacido en Zumarraga (Gipuzkoa) en 1961, José Ignacio Munilla fue ordenado sacerdote en la diócesis de San Sebastián en 1986, tras lo que fue coadjutor en la iglesia de La Asunción, en su localidad natal, para ser nombrado posteriormente párroco de El Salvador, en esta misma ciudad.
En 2006, fue nombrado obispo de Palencia por Benedicto XVI, que tres años más tarde lo designó obispo de San Sebastián, cargo del que tomó posesión en enero de 2010.
En el vídeo de bienvenida mostrado en Alicante, Munilla ha resaltado que accede a esta responsabilidad "con confianza", porque pese a que la responsabilidad le "supera", va a tener la "colaboración" de toda la diócesis, a la par que ha asegurado que ya reza por todos los católicos oriolanos y alicantinos.
"No he estado nunca en vuestra tierra, por lo que necesitaré un tiempo de adaptación", ha reconocido Munilla, quien ha afirmado que a pesar de ello, ya está "en familia, incluso antes de llegar", porque esa es "la gran virtud" de la Iglesia.
Primero Orihuela y después Alicante
Por su parte, Murgui ha explicado que lo más seguro es que el próximo 12 de febrero Munilla tome posesión en Orihuela y un día después lo haga en la ciudad de Alicante, en un discurso en el que, emocionado, ha afirmado que ha disfrutado como obispo "aunque he pasado lo mío, pero estoy muy orgulloso".
De la misma manera, ha indicado que está enamorado de Alicante, que es "la millor terreta del món" y que si hay "algo parecido al cielo en la tierra, eso es Alicante", así como ha reconocido que espera que a Munilla "no le hagan sufrir tanto" en su toma de posesión, ya que en 2012 Murgui hubo de entrar en Orihuela sobre una mula blanca "pero sin silla de montar", ha bromeado.
Murgui ha señalado que la diócesis está "muy viva" y "en perfecta armonía" con la provincia, ya que Alicante es "de las zonas de Europa más acogedoras", así como también ha sostenido que la región es muy creativa y que en sus más de nueve años como obispo se ha encargado más "de coordinar y sumar la creatividad en su conjunto que de hacer inventos individuales".
Así, ha explicado que el reto de Munilla es el de conseguir que esa creatividad individual vaya en conjunto, como un colectivo, para conseguir ser "una orquesta", un hecho que ha esperado que Munilla consiga porque es una persona "muy preparada, muy versada en el territorio de los medios y muy preparada intelectualmente".
Por último, ha reconocido que su sueño era ir en misión a Perú tras su retirada, pero que la pandemia lo ha "complicado", por lo que, por ahora, espera "una solución mixta entre estar aquí -en Alicante- y fuera".