La policía detiene en Pamplona a un yihadista de 19 años con manuales de explosivos en su casa

Una operación de la Comisaría General de Información (CGI) de la Policía Nacional ha terminado con la detención de un joven yihadista de 19 años que había jurado lealtad a Daesh, que pretendía convertirse en soldado de esa organización terrorista y al que se le localizaron manuales de explosivos en su casa de Pamplona.

La investigación comenzó a mediados de 2022. En ese momento los expertos en la lucha contra el terrorismo detectaron a este joven, que apenas alcanzaba la mayoría de edad, y que ya estaba férreamente alineado con los postulados de Daesh, el autodenominado Estado Islámico (ISIS).

El joven difundía, a través de sus redes sociales, material radical y violento de corte yihadista en el que se alentaba a cometer acciones terroristas.

Había llegado incluso a ir un paso más allá. El chico realizó su juramento de fidelidad al actual califa de la organización terrorista, Abu Hafs Al-hashimi Al-Qurashi, reconociendo con ello su pertenencia a la organización terrorista, alineándose con sus objetivos y realizando actividades en favor de la misma.

Su intención era convertirse en muyahidín, en un soldado de la yihad. Por eso, había entablado contacto a través de sus redes sociales con miembros de Daesh situados en zona de conflicto, concretamente en Siria. Ya había planificado su marcha hacia Oriente Próximo para entregarse a la causa.

Explosivos y armas

Según relatan fuentes de la investigación, el detenido tuvo, durante el tiempo que duró la investigación, una actividad virtual "masiva y frenética" de acuerdo con su ideología yihadista. Así, buscó, consumió y posteriormente difundió a otros usuarios miles de archivos multimedia de naturaleza radical, conteniendo ejecuciones, exaltaciones de los líderes e incluso asesinatos.

Durante la investigación, se detectó que operaba en distintas redes sociales, participando en gran cantidad de grupos de índole yihadista. Entre ellos, el más representativo, era el denominado por el detenido como "canal de todo", por ser un repositorio donde estaban al alcance miles de archivos elaborados por productoras oficiales de DAESH.

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El detenido no solo aplicaba estrictas medidas de seguridad virtuales para evitar ser localizado por los servicios policiales, sino que instruía a otras personas afines -advirtiéndoles de la importancia de su cumplimiento-. Para ello se servía de manuales específicos de ciberseguridad.

Durante la madrugada de este pasado miércoles los investigadores irrumpieron en su casa para detenerle. Al registrar su casa, e incautarse de numeroso material informático, localizaron también cientos de manuales para la autocapacitación terrorista.

Entre ellos figuraban manuales de elaboración de explosivos, detonadores, venenos, consejos para ocultar la actividad terrorista en Internet, guías para realizar de transacciones financieras seguras, otros con los que aprender a manejar todo tipo de armas, y también manuales con consignas para el reclutamiento y captación de nuevos combatientes.

Doble vida

Junto a la Comisaría General de Información la operación ha sido desarrollada por la Brigada Provincial de Información de Pamplona, en colaboración con la Brigada Provincial de Información de Almería, el Centro Nacional de Inteligencia (CNI), la Direction Générale de la Surveillance du Territoire (DGST) de Marruecos y la agencia EUROPOL.

Todo fue coordinado por la Fiscalía de la Audiencia Nacional y dirigida por el Juzgado Central de Instrucción nº1, quien ha decretado este viernes el ingreso en prisión del joven yihadista.

Los agentes encargados de la investigación destacan la capacidad del detenido para llevar una doble vida: mientras se autocapacitaba y adoctrinaba a través de Internet, su vida pública se desenvolvía dentro de la normalidad, pasando completamente desapercibido.