Carlo Ancelotti, en sus épocas en el AC Milan y el Real Madrid

Carlo Ancelotti, en sus épocas en el AC Milan y el Real Madrid Diseño: Deportes EE

Fútbol

El amor "especial" de Ancelotti por Madrid y Milan: el día que tumbó a la Quinta del Buitre y el 'no' que le devolvió al Bernabéu

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Carlo Ancelotti es una figura que despierta afecto en el fútbol, y no es para menos. Pocos entrenadores han dejado huella en dos de los equipos más grandes de Europa, Real Madrid y Milan, que este martes se enfrentan en el Santiago Bernabéu en un partido de Champions League cargado de historia y emoción para el entrenador italiano (21.00 horas).

Para Ancelotti, estos dos equipos representan algo más que meras etapas de su carrera profesional; ambos ocupan un lugar especial en su corazón. La historia se ha cruzado en varios momentos antes de este partido, como aquella goleada del Milan de Arrigo Sacchi al Madrid de la 'Quinta del Buitre' en 1989, o su rechazo a una propuesta del Inter de Milán en 2021, un "no" que, casi mágicamente, facilitó su regreso al banquillo del Bernabéu.

Ancelotti ha expresado en numerosas ocasiones su profundo respeto y cariño por ambos clubes. "Madrid es especial. El Milan está en mi corazón, jugué, fui entrenador, es una gran parte de mi vida profesional. Pero el Real es el Real, ¿qué puede haber mejor? Aquí hay respeto por la historia, todos los futbolistas del pasado están presentes en las fotografías de la Ciudad Deportiva", comentó el técnico hace solo unos meses. La de este martes será su primera vez contra el Milan con un equipo no italiano.

Hay que remontarse hasta el 19 de abril de 1989 para encontrar uno de los momentos más recordados de la rivalidad entre ambos clubes, que no se medían en partido oficial desde hace 14 años. Aquel día se jugó la vuelta de semifinales de la antigua Copa de Europa, donde el Milan de Sacchi infligió una histórica derrota al Real Madrid.

Aquella noche, los rossoneri se impusieron con un contundente 5-0 que sellaría su pase a la final y marcaría una época dorada para el club lombardo. Para el Real Madrid, que había empatado 1-1 en el Bernabéu, el partido en San Siro se convirtió en una auténtica pesadilla. Apenas transcurrida una hora de juego, los italianos habían marcado cinco goles y destrozado las ilusiones del equipo entrenado por el neerlandés Leo Beenhakker.

Curiosamente, Ancelotti fue uno de los protagonistas de aquella histórica goleada. Fue él quien abrió el marcador, batiendo a Paco Buyo con un potente disparo desde fuera del área, en uno de los mejores goles de su carrera como jugador. Después de este triunfo, el Milan aplastó al Steaua de Bucarest en la final (4-0), en el Camp Nou, y consolidó su leyenda de equipo invencible.

El año siguiente, en la Copa de Europa 1989/90, el Milan volvió a cruzarse con el Real Madrid en octavos de final, y de nuevo eliminó al equipo español. Tras vencer 2-0 en casa con goles de Rijkaard y Van Basten, los italianos supieron defender su ventaja en el Bernabéu. A pesar del gol de Butragueño que animó al Madrid antes del descanso, la defensa milanista, con Tassotti, Baresi, Costacurta y Paolo Maldini, se mantuvo firme y eliminó cualquier posibilidad de remontada, dejando al Madrid, liderado por Hugo Sánchez, en repetidos fueras de juego. Al final, el Milan volvería a levantar el título tras imponerse al Benfica en la final.

El intento del Inter en 2021

Los lazos de Ancelotti con el Milan van mucho más allá de aquella época como jugador; también dirigió al equipo como entrenador y conquistó nueve títulos, entre ellos dos Champions League. Por eso, cuando en 2021, tras la marcha de Antonio Conte, el Inter de Milán le tanteó para dirigir al equipo, Ancelotti no dudó en cerrar la puerta. Su motivo era claro: no podía traicionar al club que llevaba en el corazón.

Aunque en su infancia fue simpatizante del Inter, los años como jugador y entrenador del Milan le cambiaron, y la perspectiva de entrenar a su eterno rival era algo que no estaba dispuesto a considerar. "Es verdad que de pequeño era del Inter, pero creciendo cambié de equipo. Hice la prueba, pero al final fui a la Roma. Jugando con el Milan siempre fue el adversario importante, pero siempre con respeto", admitió en sus primeros meses tras regresar al Real Madrid.

Sin saberlo en ese momento, esa decisión iba a facilitar su regreso al Real Madrid. Solo unos días después de rechazar la oferta del Inter, el teléfono de Ancelotti sonó con una llamada desde Madrid. El club —que descartó fichar a Conte— contactó con él, que se encontraba en Liverpool, para tantear su disponibilidad para volver al banquillo del Bernabéu, cargo que había ocupado con éxito entre 2013 y 2015, llevando al club a la conquista de La Décima.

A pesar de tener contrato con el Everton hasta 2024, Ancelotti no dudó en aceptar la oferta. Explicó a sus jefes en el club inglés que esta era una oportunidad única, y los toffees entendieron su decisión, permitiéndole partir. La elección de Ancelotti no fue impulsada por cuestiones económicas; de hecho, aceptó una reducción de su salario casi a la mitad. Pero para él, las emociones y el vínculo con el Real Madrid y su afición pesaban más que cualquier consideración financiera. El resto, con dos Champions más en tres temporadas, es historia.

Para Ancelotti, Real Madrid y Milan representan mucho más que títulos o logros. Ambos clubes han sido testigos de algunos de los momentos más significativos de su vida profesional y personal. Su primera etapa en el Madrid, donde logró la ansiada Décima, le brindó una satisfacción y una felicidad únicas que no dudó en valorar. Y su historia en el Milan, tanto como jugador como entrenador, lo formó en el fútbol y le dio su primera gran familia deportiva.

Con la camiseta rossonera, Ancelotti conquistó títulos y vivió rivalidades épicas, pero su paso por el Real Madrid le dejó la sensación de estar en un lugar verderamente especial, como él mismo ha dicho en alguna ocasión: "Aquí hay respeto por la historia". Ambos equipos ocupan una posición especial en su vida, y aunque a lo largo de su carrera ha entrenado a otros clubes importantes, como Chelsea, PSG o Bayern de Múnich, el Madrid y el Milan son, sin duda, sus dos grandes amores futbolísticos.

Este martes, cuando los dos equipos se enfrenten en el Bernabéu, Ancelotti no podrá evitar una mezcla de sentimientos. Como entrenador del Real Madrid, buscará llevar al equipo a la victoria, pero no olvidará que al otro lado del campo estará el Milan, el equipo que le enseñó gran parte de lo que sabe y donde dejó una parte de su alma.