Un peregrino valenciano de 68 años cruza Salamanca camino de Santiago a lomos de su pura raza española

El Camino de Santiago, sea por el 'francés', el portugués o la Ruta de la Plata, siempre presenta historias curiosas y personajes de los más variados. Es el caso del intrépido valenciano José Luis Peinado, de 68 años, que se ha embarcado en el camino de Santiago vía Ruta de la Plata y que, estos días, cruza la provincia de Salamanca, pero a lomos de un tordo de 19 años al que llama 'Desafío'. Concretamente en la jornada del sábado entró por el Puente de la Malena, en Puerto de Béjar -don los miliarios- y hace un alto en la casa del peregrino de Fuenterroble de Salvatierra, donde le da cobijo el cura Blas Rodríguez. Así, emprenderá la marcha mañana martes para llegar hasta la capital, donde estará dos días, porque, indica a El Español de Castilla y León, "es una de las ciudades más hermosas de las que me puede encontrar".

Aprovechando las calzadas romanas y redescubriendo la riqueza del patrimonio milenario cultural de nuestro país, tras etapas iniciales desde Extremadura, pasa por Mérida, la Emérita Augusta romana, a lomos de su fiel 'Desafío', un tordo de 19 años, tambien con solera y veterano pero incombustible como su dueño y jinete, y de Pura Raza Española, "la raza más noble y antigua de todas las caballares, y que al igual que Mérida era la capital de la Lusitania. Añadir que es la raza española de la que sacaron al caballo Lusitano del país vecino.

El caballo de Pura Raza Española (PRE) fue creado en el siglo XVI en las Caballerizas Reales de Córdoba por orden de Felipe II y partiendo de yeguas andaluzas de origen ancestral con los mejores sementales del Imperio Español. Aunque la raza sufrió épocas de transformación e incluso crisis, fue restaurada en el siglo XIX y principios del XX, con ayuda de sementales orientales, la creación de la Yeguada Militar y la conservación de tipos en pocas ganaderías como la Cartujana de Vicente Romero en Jerez o la de Miura en Sevilla. Hoy día es una raza de difusión mundial de la que han derivado otras razas como el Lusitano en Portugal, o el famoso Lipizzano de la Escuela Española de Equitación de Viena.

En vísperas del solsticio de verano, José Luis y 'Desafío' entran en tierras salmantinas, donde el campo y varios jinetes charros le dan la bienvenida y escoltarán hacia el norte, en unas etapas emocionantes donde el Hornazo de Salamanca será parte de la dieta, y quién sabe si aun en estas borrascas de transición tenga que arroparse con una buena manta zamorana. 

El peregrino ecuestre asegura ser "un enamorado de la dehesa como enclave de la biodiversidad que este ecosistema mantiene", siendo uno de los más perfecos en producción agro ganadera. Asegura que "ha sido un reto personal que llevo enmarcado y preparándome desde hace más de un año", en el que le han prestado ayuda diversos profesionales veterinarios, entrenadores ecuestres y nutricionistas.

Respecto a lo que representa el sector ganadero equino, al que, dice José Luis "deseo dar relevancia", Castilla y León es la segunda Comunidad Autónoma después de Andalucía en carga ganadera con aproximadamente unas 200.000 cabezas. En cuanto a este turismo, uno de los menos conocidos y más especializados que existen, puede servir de cohesión y desarrollo territorial, apuntan desde los colectivos ecuestres que dan soporte al peregrino valenciano.

En este apartado, conviene destacar los datos del turismo ecuestre en la provincia de Salamanca, ya que existen 3.966 explotaciones de caballos en la provincia charra, un total de 8.625 cabezas de ganado equino, del total 3.289 son caballos PRE. Según datos del estudio de la Unión Europea, cada caballo genera de media de 2.200 a 2.800 euros al año, y en puestos de trabajo directo son 0,3 empleos por caballo. Atendiendo a esta cifras, hablamos de 21 millones de euros de facturación y 1.725 puestos de trabajos directos. El turismo ecuestre es uno de los sectores con mayor auge en las nuevas estrategias en la UE y a nivel mundial, ya que es "una estrategia válida para conexionar el resto de las acciones que se desarrollan en el territorio, entre ellos el turismo ecuestre religioso", Salamanca tiene varios caminos y romerías como la de la Peña de Francia, Romería del Cristo de Cabrera y el camino de Santiago que pueden suponer un 'input' para este territorio

No es menos cierto que a España le falta preparación para recibir a este tipo de turistas que tiene un nivel adquisitivo cultural alto, y más Castilla y León. Es el deporte ecuestre el que más ha crecido en el periodo de pandemia y que se prevé un mayor aumento tras la pandemia. Castilla y León tiene desde la antigüedad una gran relación con lo ecuestre, teniendo además tres razas autóctonas consideradas en peligro de extinción, hispano bretón, el losino y el burro zamorano Leones.

Mientras,  el peregrino ecuestre José Luis Peinado descansa dos jornadas en Fuenterroble, donde la mesa siempre está puesta, el pienso para el caballo no sobra y disfruta del cobijo de Blas Rodríguez y el amplio grupo de caballistas de Salamanca. Buena camino, caminante!