Es la misma historia cada época de lluvias. En cuanto las precipitaciones aparecen en Zamora, dos de sus aparcamientos públicos, en la plaza de la Constitución y en el parque de San Martín, comienzan a sufrir graves filtraciones de agua, se forman charcos y humedades en su interior y los ascensores comienzan a fallar.

Un problema que el Ayuntamiento de Zamora arrastra desde hace años, pese a que estos aparcamientos apenas tienen 20 años de antigüedad. Estos fueron construidos por la empresa Urbaser en 2001 y 2002, respectivamente. A cambio, el Ayuntamiento de Zamora (entonces gobernado por Antonio Vázquez) le otorgó una concesión administrativa para la explotación de los mismos durante 33 años. 

Un contrato que fue anulado por el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León en 2004, tras una demanda presentada por una de las empresas concursantes que se personó como perjudicada.

Tras varios recursos, el contrato quedó definitivamente anulado en 2006, y el pleno municipal acordó encargar a la misma empresa que continuara con la explotación del servicio de ORA y dichos aparcamientos, hasta la ejecución de la sentencia, cuando debía realizarse la nueva adjudicación del servicio.

Según las reclamaciones públicas realizadas en su día por la oposición de Izquierda Unida, aunque el equipo de gobierno del Partido Popular se comprometió a licitar "inmediatamente" dicho contrato, "esto nunca ocurrió".

Así que desde entonces se pueden observar las innumerables filtraciones de agua, las enormes manchas y desconchones de sus techos y las humedades que se acumulan en su interior, cada vez que llueve en la ciudad.

Con la nueva legislatura y un cambio en el equipo de Gobierno es David Gago, como nuevo concejal de Protección Ciudadana de la que dependen los aparcamientos, quien hereda un problema enquistado desde hace años. En una reciente entrevista con EL ESPAÑOL Noticias de Castilla y León, el concejal explicaba que entra dentro de sus planes remodelar ambas instalaciones. 

Eso sí, la solución "no se antoja ni sencilla ni tampoco nada barata", pero Gago cree que "la tenemos que hacer" a lo largo del mandato. El concejal y primer teniente de alcalde es consciente de que se trata de dos obras "bastante potentes y de gran envergadura". Y es que la solución pasa por levantar la plaza de la Constitución y también en el parque de San Martín para poder permeabilizarlas y evitar filtraciones. 

Gago recuerda que las construcciones realizadas hace dos décadas "se hicieron con unas deficiencias estructurales importantes, que aunque en un principio no las veíamos y parecía que todo ha quedado muy bonito. Pero las consecuencias son las que son".